El proyecto VoluntaRíos organizó la charla "Río Aguasvivas: un río a recuperar, desde Blesa hasta el pantano de Moneva" dentro del ciclo "Encuentros con los ríos y humedales de Aragón". La conferencia tuvo lugar en el Centro Joaquín Roncal de la CAI de Zaragoza el 30 de marzo. Presentados por Mariano Mérida, de VoluntaRíos, actuaron como ponentes Javier del Valle, profesor de Geografía de la Universidad de Zaragoza y consultor técnico de la CHE (Confederación Hidrográfica del Ebro) con el tema "Río Aguasvivas: sus valores naturales y características hidrológicas", Javier Lozano, de El Hocino de Blesa con la lección "Posibilidades turísticas y necesidad de regeneración" y José Antonio Lahoz, de la Asociación El Reguero de Moneva con la exposición "Vivencias perdidas".
En la temática de los tres conferenciantes subyacía la construcción en 1967 de un canal de 20 km desde Blesa a Moneva que anulaba el río con la pretensión de un mejor aprovechamiento de las aguas, que, por las infiltraciones, no se pierden sino que van a parar a otros lugares como sigue ocurriendo con las aportaciones acuíferas al río Ginel de Mediana y a los manantiales de Ariño.
Javier del Valle expuso una visión general del río Aguasvivas como afluente de la margen derecha del Ebro con 103 km de recorrido. Mostró en diapositivas los principales lugares de su trayecto desde su nacimiento en un valle de la Cordillera Ibérica en Allueva pasando por Segura de Baños, Moneva, Almonacid de la Cuba, Belchite, Almochuel hasta su desembocadura en La Zaida. Asimismo, presentó como principales problemas hidrológicos la dificultad de llenado del pantano de Moneva por las infiltraciones de agua, la dificultad en los regadíos, la canalización en estado deficiente, los problemas en el canal de alimentación de Almochuel, la elevada salinidad en aguas subterráneas y el aumento de extracciones y pozos.
Javier Lozano aludió al recuerdo del río como disfrute para pescar, bañarse, fiestas y trabajo en los molinos. Hizo un repaso del patrimonio hidráulico del Aguasvivas con las diversas presas, balneario de Segura, salinas de Armillas, pantano de Moneva y multitud de azudes. Finalmente mostró las posibilidades turísticas que ofrece la zona y reivindicó la necesidad regenerar el río.
José Antonio Lahoz analizando el patrimonio, la vegetación y la fauna del Aguasvivas a su paso por Moneva, realizó un canto a las vivencias experimentadas por los vecinos de Moneva, afirmando que la cuenca era vida, disfrute, historia y cultura y que ahora solo quedan los vestigios porque el río se acabó.
La sesión terminó con la intervención de Jesús Gadea de Monforte de Moyuela, que reivindicó la conservación del río Moyuela o Santamaría y con un ameno debate.
