En verano, los pueblos reviven. Es el momento de dejar atrás el ruido de la ciudad y disfrutar de la calma, el fresquito de las noches, las conversaciones de la plaza y los juegos en la calle.

Por eso, la Residencia Rey Ardid de Belchite se ha propuesto ofrecer a los mayores, de la comarca y de todo Zaragoza, un lugar donde pasar el verano en la mejor compañía y con los mejores cuidados. Una iniciativa que se enmarca en el programa Descanso al cuidador y que ofrece estancias temporales e incluso diarias, que permiten a los familiares disponer de una alternativa en sus vacaciones.

Como todas las residencias del Grupo Rey Ardid, en Belchite se ofrecen una serie de actividades diarias que favorezcan una forma de vida activa y autónoma a los mayores. Así, cada día, los residentes, además de las actividades básicas de higiene, manutención, lavandería y cuidados de enfermería realizan diferentes actividades en el centro organizadas y coordinadas por el departamento de Terapia Ocupacional.

Programa de gerontogimnasia, para mantener y mejorar la autonomía física; programa de integración al entorno, con talleres de lectura, prensa, y coloquios; y programas de animación sociocultural son los que más gustan a los usuarios de este servicio.

"Aquellos usuarios que participan en las actividades del centro, son los residentes que más contentos están con el servicio recibido, dado que aprenden y mantienen sus habilidades", comenta la directora de la residencia, María Vázquez. "Me gusta aprender. Como en mis tiempos no estudiábamos, ahora es el momento", indica Carmen, una residente.

Además de las estancias permanentes y de las estancias temporales, el centro ofrece desde el año pasado servicio de estancias diurnas con diferentes modalidades adaptadas a las necesidades del cuidador habitual en las que se incluyen también las diferentes actividades.