La promoción cultural es un objetivo básico de las instituciones aragonesas en su lucha contra la despoblación del mundo rural, propósito al que dan visibilidad comunicadores como Ana Segura, presente en la Semana Cultural de Alcorisa, donde entrevistó a Maite Pérez Marco, bibliotecaria. Maite describió con singular entusiasmo todo lo que este acontecimiento entraña para el relanzamiento cultural de la población, merced a una importante implicación vecinal; también se hizo eco de que muchos lectores descubrieron durante el confinamiento su pasión por la literatura, lo que repercutió en un notable incremento del préstamo de libros (incluso con listas de espera), tanto de novedades editoriales como de los clásicos.
Es realmente gozoso escuchar la vehemencia con la que Maite se expresa cuando alude al mundo del libro y glosa la capacidad de las bibliotecas, en especial de las pequeñas bibliotecas rurales y de los clubes de lectura, para establecer un fructífero puente entre editores, autores y lectores; pasarela cómplice que los protagonistas cruzan felices de un encuentro más que satisfactorio para todos ellos.
Precisamente, en el mismo programa, La Torre de Bábel, intervino seguidamente Luis Moliner, autor de Fósiles con nombre aragonés, donde se defiende el papel cardinal del entorno alcorisano en la huella paleontológica aragonesa. Luis, que ha donado una buena parte de su valiosísima colección de fósiles al Museo de Ciencias Naturales de la Universidad de Zaragoza, señalaba la particular visibilidad con que la impronta de las diferentes épocas geológicas se hace patente en el Bajo Aragón.
La Semana Cultural de Alcorisa es el eje en torno al cual gira un notable catálogo de actividades y demuestra cuan importante es la presencia en el orbe rural de agentes dinamizadores como las bibliotecas.
