Felicidades Zaragoza, me alegro que la hayan elegido para la Expo 2008, pero dudo mucho que de esto se beneficie todo Aragón. Me gustaría contaros las dificultades que a diario pasamos los que circulamos por la N-260 desde Campo hasta enlazar con la N-230. Tenemos más de 350 curvas en un tramo de 55 km, pero lo peor no es que tengas que ir moviendo constantemente el volante de un lado a otro, sino su anchura. Lo normal es que los camiones vayan invadiendo el carril contrario y al tomar cualquier curva necesitan toda la carretera. Cuando se cruzan dos vehículos grandes, en una de sus múltiples curvas, tienen que maniobrar para poder seguir, y no podemos olvidar que en los puentes que existen sólo hay paso para un vehiculo. Afortunadamente la Alta Ribagorza no sólo depende de la ganadería, sino que el turismo y algunas empresas instaladas en la zona hacen que la gente no tenga que irse, como ocurrió años atrás, a otras zonas para encontrar su medio de vida. Para seguir manteniendo, y porque no, repoblar pueblos semiabandonados, la comunicación por carretera es vital (que no cueste hora y media llegar al hospital más cercano, el de Barbastro). --Carlos Larraz. Laspaúles (Huesca)M