Vivimos tiempos de desmitificación. Los sueños se desmoronan, los héroes se revelan de papel. Tigres de papel, héroes soñados. Pero detrás nada.

Como habría hecho cualquier padre a la vieja usanza, la gente seria e integrada de Chunta Aragonesista, nuestros tigres de papel, nuestros entrañables charrozas , han puesto de patitas en la calle a esa colla de rojos e inconformistas de Chobenalla, su rama juvenil, su cantera.

Uno de los comisarios del Consello Nazional, su secretario organizativo, Gonzalo Orna, buscó a los rebeldes por las catacumbas de la sede para notificarles, por orden de la Ejecutiva, el acta de expulsión, adjuntándoles funcionarialmente un recibí para que, antes de darse puerta, no fueran a llevarse la subvención, o se mangaran algún ordenador o dieta. Con dignidad, con la cabeza alta, la gente de Chobenalla abandonó esa vieja parroquia, cuyas capillas, mal ventiladas, emanan un olor rancio, como a papel antiguo, a papel mojado.

La expulsión de ¡150 militantes! del seno de Chunta viene motivada, desde la oficialidad del partido, por una supuesta vulneración estatutaria, pero parece, en el fondo, que los motivos reales de la decapitación política de Chobenalla tenían poco que ver con las asambleas, comisiones y cuotas del partido.

La defensa, por parte de los jóvenes, de la independencia y la lengua de Aragón, su rechazo a la Expo y a las actividades urbanísticas promovidas por su colega Antonio Gaspar (rascacielos, concursos internacionales, recalificaciones, especulación), y su visión crítica hacia los pontífices --Bernal, Fuster, Labordeta-- que están convirtiendo la fuerza en una sucursal del socialismo utópico, o de la socialdemocracia, han debido poner nerviosos a los charrozas fundadores. Cuya ultraconservadora reacción, apelando a la máxima pena disciplinaria, no encuentra parangón en otros partidos. ¿Se imaginan el escándalo que se habría organizado si el PP, por supuestas desavenencias o críticas, decidiera expulsar a las Nuevas Generaciones, o el PSOE hacer lo propio con las Juventudes Socialistas?

Personalmente, me parece bien que la gente joven reivindique la independencia de su comunidad, una identidad, otra cultura, un mundo nuevo y acaso mejor. De lo contrario, no serían jóvenes, sino viejos prematuros. También Chesús Bernal, antes de vestirse de romano, y convertirse en charroza , prometía la regeneración, la revolución, la autodeterminación. Ya lo ven ahora, en la barrera de La Misericordia, disfrutando de los toros, mirando en tensión los otros toros desde el burladero de La Aljafería y expulsando a corrales a estos novillos sin afeitar que se obstinan en recordarle su alegre triscar ideológico.

Con el acto inquisitorial, fascistoide, de la expulsión de los jóvenes, Chunta se niega a sí misma buena parte de ese supuesto aval vanguardista que exornó otras de sus actividades. Pretender, desde su pequeñaburguesía, seguir enarbolando la bandera de la izquierda, del nacionalismo alternativo o de la democracia interna puede formular un deseo, pero no sostener un hecho. Pena.

*Escritor y periodista