Que el concejal de Deportes de Zaragoza, Luis Pastor, (CHA) y el director general del ramo de la DGA, Pedro García Villamayor, (PSOE) no se llevan bien es notorio aunque públicamente no dicen nada y sólo se aprecien sus escasas apariciones juntos. Ahora, uno y otro, como picados, han conseguido traer dos acontecimientos de baloncesto a Aragón. El primero, la final de la Copa del Rey a Zaragoza, y el segundo, la Copa Príncipe a Huesca. Bien está este doble éxito pero quizá sería bueno que ambos políticos se dieran la mano alguna vez y no sólo simbólicamente. Además, PSOE y CHA tampoco están tan lejos. Al menos en Zaragoza.