Por primera vez desde que se creó hace un año, el miércoles se reúne la Comisión del Agua, un foro aragonés cuyo objetivo es canalizar el debate hidráulico hasta alcanzar el consenso. Superados los primeros desencuentros, que obligaron a modificar la composición del organigrama para que toda la sociedad aragonesa estuviera equilibradamente representada entre sus 66 miembros, la comisión tiene que ser capaz de alcanzar decisiones concretas sobre las obras hidráulicas más controvertidas. El futuro del agua en Aragón ha sido excesivamente manoseado en los últimos tiempos, y conviene afrontar la cuestión con decisión y generosidad para no perder más tiempo. Los 66 miembros de la comisión tienen que estar a la altura de lo que representan. En el orden del día figura Yesa, y un acuerdo sobre este pantano supondría el consenso del 80% del Pacto del Agua, según ha dicho el consejero Boné. Sería un buen estreno, sin ninguna duda.