Tonelada a tonelada, el aeropuerto de Zaragoza empieza a remontar la larga crisis que lo situó en los últimos lugares del ránking del tráfico aéreo en España. Y no porque sus instalaciones justificaran este deterioro sino porque estaban injustificadamente infrautilizadas. La llegada de dos grandes firmas, Caladero e Inditex, ha cambiado la tediosa tendencia hasta situar el aeropuerto en el quinto puesto gracias al flujo de mercancías que registra, lo que demuestra que con una buena gestión y un mejor servicio, las pistas aéreas de Zaragoza pueden convertirse en un instrumento logístico de primer nivel.