Si nos invaden los extraterrestres, si se produce la III Guerra Mundial, si nos atacan a la vez los cuatro jinetes del Apocalipsis, si el cambio climático amenaza con acabar con la vida en la península ibérica, si nos afecta un terremoto de 200 en la escala de Richter, o cualquier otra catástrofe semejante, entonces sí, entonces lo necesitaría el país, se cumpliría el requisito establecido por González y deberíamos pensar en una gran coalición de todos los partidos, de todos, para enfrentar semejante situación. Mientras tanto, dejen de marear la perdiz. Hemos pedido perdón por los errores cometidos. Estamos enfrentándonos por tierra, mar y aire a las políticas neoliberales del Gobierno de Madrid y del de aquí. Estamos acumulando fuerzas para poder reconstruir los pilares del Estado Social que hemos construido en las últimas décadas, nos hemos comprometido a acabar con la reforma laboral, estamos denunciando las consecuencias del austericidio, estamos denunciando el aumento de la desigualdad, de la pobreza, la falta de esperanza de los parados, estamos imaginando medidas de urgencia para nuestros jóvenes, estamos comprometiéndonos con las personas con discapacidad, estamos pues en las antípodas de las políticas neoliberales del PP, y ahora viene González a poner el huevo. Ya vale. En un partido democrático son sus militantes y sus órganos los que determinan la política. Pérez Rubalcaba ha respondido con un no rotundo. Deje de tocarnos las narices, Sr. González.

Profesor de universidad