Zaragoza necesitaba ofertar ayudas para la rehabilitación de viviendas, con especial incidencia en la mejora de la eficiencia energética y la accesibilidad de los vecinos de muchos edificios antiguos. La oposición venía reclamándolas, pero la pandemia parece haberlo acelerado. El Gobierno PP-Cs anunció ayer que destinará 6,5 millones de euros para este fin, con los que se podrán sufragar hasta el 50% de las obras. Es oportuno el plan, en tanto en cuanto no solo podrá mejorar la calidad de vida de los residentes de muchas comunidades sino que también supondrá un impulso para el sector de las reformas, dirigido en su mayoría por autónomos. Es importante que se haya aclarado de dónde saldrá el dinero, pero más importante será que los realmente necesitados de estas obras dispongan de presupuesto suficiente para abordarlas, después de la situación laboral y económicaque está dejando el coronavirus.
