Esta noche la mitad de los zaragozanos cenará fuera de sus casas y tendrá que utilizar el transporte privado para regresar de madrugada. Otro tanto ocurrirá la noche de fin de año, pues pese a las previsiones de estudio que se hicieron el año pasado ni en Nochebuena ni en Nochevieja habrá buses urbanos, y el servicio de taxi quedará a la exclusiva voluntad de los profesionales que quieran trabajar. Todos los discursos sobre la potenciación del transporte público en detrimento de los coches particulares en días especialmente dispuestos al consumo de alcohol se convierten en papel mojado cuando desde las instituciones no se hace una política decidida. La pasada Nochevieja fueron muchos los zaragozanos que expresaron su malestar por la falta de transporte público y taxis durante la madrugada para poder volver a casa sin necesidad de utilizar los vehículos particulares. Tendrá que ser pues la Policía Local la que habrá de emplearse a fondo.