Hace cerca de tres años que la sociedad aragonesa se levantó en contra del Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Dicho movimiento fue encabezado por la asociación Aragón Stop Sucesiones y Plusvalía, que, con la colaboración y participación de los aragoneses, de los cuales ha recabado más de 200.000 firmas, ha dado voz a ese 80 % de los mismos que está en contra del impuesto más cruel e injusto que en la actualidad estamos sufriendo.

Sucesiones es el impuesto más cruel por varios motivos. El primero es por el momento en el que se produce, pues va unido a la pérdida de un ser querido, la cual muchas veces no es esperada, y nos coge desprotegidos tanto intelectual como emocionalmente, ya que la mayoría de los ciudadanos tenemos un gran desconocimiento sobre este impuesto y del grave perjuicio que nos puedes llegar a infringir. La máxima crueldad se produce, no solamente cuando, en muchos casos los ciudadanos que sufren este impuesto se ven desposeídos de todos aquellos bienes generados por sus padres, abuelos y demás ascendientes, hay que tener en cuenta que un 10 % de los herederos se ven obligados a repudiar su herencia, si no cuando, en algunas de las ocasiones, adquieren unas deudas que no pueden pagar el resto de sus vidas.

Las causas por las que este impuesto es injusto son múltiples y variadas. Sin ánimo de ser exhaustivo podríamos destacar las siguientes:

Es una ley claramente anticonstitucional, ya que atenta contra los artículos 14, 31, 33 y 39 de la Constitución Española.

El impuesto deja de gravar a los grandes patrimonios bien organizados y hace recaer su peso sobre las rentas medias y bajas.

El tipo máximo del impuesto es del 34 %, pero en algunos casos puede llegar al 81,6 % de patrimonio heredado, sin tener en cuenta otros impuestos y gastos generados por la herencia, lo cual es evidentemente confiscatorio. Las tasaciones inmobiliarias arbitrarias hacen que el impuesto suba y que el precio de mercado de un bien inmueble sea muy inferior al tasado por la Administración.

Obliga a pagar a un heredero por un bien que sus ancestros ya han pagado, tanto cuando lo adquirieron, como durante el resto de sus vidas.

Algunas personas se preguntarán la causa por la que, a pesar de la inmensa cantidad de motivos en contra del impuesto de Sucesiones, algunos de los cuales hemos enunciado de una forma somera anteriormente, y que demuestran su crueldad e injusticia, todavía hay un 20 % que está a favor del mismo.

Evidentemente, una gran mayoría de ese porcentaje, no tienen la suficiente información al respecto, y son manipuladas por otra minoría que, o pertenecen o aspiran a pertenecer a esa casta de políticos que quieren a vivir del erario público el resto de sus días, y para vivir del cuento y de forma parasitaria necesitan que las arcas públicas se llenen, sin importarles que los fondos salgan de impuestos crueles e injustos como el de sucesiones.

Desde Aragón Stop Sucesiones y Plusvalía vamos a seguir luchando por los intereses de todos los aragoneses, haciendo todo lo que esté a nuestro alcance para luchar contra el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, y poniendo en evidencia a esa nueva casta de políticos que quieren vivir a costa del sacrificio de los aragoneses producido por impuestos crueles e injustos.

*Vicepresidente de la Asociación Aragón Stop Sucesiones y Plusvalía