Y entre ese urbanismo a la carta que parece que va a continuar desde el ayuntamiento que lidera Azcón está el outlet de Pikolín. Se está precipitando la modificación del Plan General para que el proyecto no tenga pegas judiciales y no solo PP y Cs, sino también PSOE y Vox apoyan la decisión. Hay que evitar que la empresa salga perjudicada, pero también hay que redactar un nuevo plan, porque el actual está caduco y la Zaragoza de hoy requiere de otras pautas.