Rosa Borraz está muy satisfecha por el buen tono que ha alcanzado el recuperado programa En la Frontera , un espacio cultural que pretende ser una puerta abierta a la creación de artistas locales. Tiene razón en asegurar que algunos espacios han causado sensación entre los ciudadanos, pero probablemente no ha sido por el arrebato creador de los autores sino por el esperpento que mostraban. En la Frontera es un programa cultural que tiene que crecer pero ha de hacerlo con buenos nutrientes, porque la extendida idea de que todo vale en el arte moderno es una trampa en la que no deben caer los gestores culturales.