Al preguntarles a los aragoneses por los aspectos de la salud que más les preocupan pocos mencionan el ámbito bucodental, alegando que simplemente con cepillarse regularmente ya cumplen con las necesidades higiénicas de dicha zona. Pero lo cierto es que se trata de un ámbito del bienestar más que delicado, por lo que exige llevar a cabo una serie de acciones más allá del tradicional cepillado.

En El Periódico nos hemos puesto en contacto con los mejores dentistas de toda Aragón para que proporcionen a nuestros lectores una serie de consejos que, en caso de que se apliquen al pie de la letra, conlleven una gran mejoría del estado no solo de los dientes, sino también de otros elementos tan importantes como la lengua y las encías.

UTILIZA UN IRRIGADOR PARA UNA LIMPIEZA MUY EFICAZ

Anteriormente cuando los dentistas recomendaban a sus pacientes hacer uso de este dispositivo muchos de ellos pensaban en aparatos caros y de difícil funcionamiento, pero en la actualidad el sector de la higiene bucal a nivel doméstico ha cambiado considerablemente. Basta con consultar esta comparativa de irrigadores dentales para darse cuenta de que existen modelos muy asequibles y que proporcionan resultados excelentes.

Gracias a ello no te verás obligado a efectuar un gran desembolso económico para adquirir una unidad que sea idónea para ti. Los especialistas con los que hemos entablado comunicación nos han indicado que empleando un irrigador bucal una vez por semana se consigue una higienización de toda la zona muy profunda a la par que indolora.

¿Cómo se logran tales resultados? Básicamente gracias al agua que, independientemente de si permanece solo como líquido elemento o se acompaña con un colutorio a modo de dilución, penetra entre los dientes y las encías acabando con todos y cada uno de los restos presentes en el interior.

Precisamente el último elemento mencionado acostumbra a ser muy sensible en determinados pacientes. Si es tu caso es fundamental que antes de llevar a cabo cada sesión de higienización por medio del irrigador dental ajustes su potencia hasta encontrar la cifra que sea óptima para ti, es decir, aquella que derive en una limpieza profunda sin provocar el más mínimo sangrado.

UN BUEN COLUTORIO SIN ALCOHOL, EL COMPLEMENTO CLAVE

Por sí solo el colutorio no aporta beneficios a nivel bucodental. Pero, ¿y si se utiliza para un enjuague tras cepillarse los dientes o hacer uso del irrigador? En tal caso se convierte en un complemento inmejorable, ya que las pequeñas bacterias que se mantienen inalterables en el interior de la boca con el resto de métodos puestos en práctica se eliminan, previniendo así desde las caries hasta la futura aparición de sarro.

Actualmente existe la creencia generalizada de pensar que los colutorios con alcohol son más eficaces, pero se ha demostrado que aquellos que no contienen dicha sustancia no solo ofrecen un resultado a la altura del obtenido con los primeros sacados a colación, sino que adicionalmente son mejor tolerados por la mayoría de individuos.

CEPILLO SUAVE PARA LOS DIENTES Y UNO ESPECÍFICO PARA LA LENGUA

Si a los dentistas les ha costado acabar con este mito no se queda atrás otro que a día de hoy sigue siendo creído por una inmensa cantidad de sujetos, resumiéndose en que los cepillos duros son los mejores para acabar con la suciedad y los restos de los dientes.

Todo lo contrario, puesto que ni siquiera los de nivel medio suelen ser aconsejados por los dentistas. La mayoría de ellos siempre indican a sus pacientes que la mejor opción consiste en utilizar los de tipo suave, evitando así dañar las encías, acción que en ocasiones puede acabar ocasionando problemas de tanta gravedad como una periodontitis.

Pero el cepillado no tiene que resumirse solo en abarcar los dientes, sino que la lengua no puede ser olvidada. Multitud de gérmenes se acumulan en ella, así que conviene limpiarla regularmente con el objetivo de evitar infecciones, entre otras adversidades de menor gravedad.

En los tiempos que corren es habitual que los usuarios empleen el mismo cepillo para los dientes y la lengua, acción totalmente desaconsejable -a excepción de aquellos que implementan en la parte trasera un elemento adicional circular-. ¿Lo más recomendable? Decantarse por uno específico.

HAZTE UNA HIGIENE BUCAL PROFESIONAL DE FORMA REGULAR Y EVITA LOS AZÚCARES

Existen ciertos procedimientos que uno mismo no puede poner en práctica sobre todo por falta de conocimientos. Por este y otros motivos conviene que dejes tu boca en manos de un higienista dental como mínimo una vez cada medio año.

Pero por muy óptima que sea la higiene tanto realizada por ti como la puesta en práctica por un especialista se quedaría corta si habitualmente ingieres comidas con altas cantidades de azúcares. Este tipo de alimentos han de ser apartados de tu dieta en la medida de lo posible si quieres gozar de una salud bucodental inmejorable.