La póliza de un seguro de coche a todo riesgo incluye más coberturas que si se trata de un seguro a terceros. Todo dependerá de cada compañía aseguradora, pero esta póliza es, sin duda, la ideal para aquellas personas que quieran estar completamente tranquilas tanto con su seguridad como con la de su coche.
Por lo general, hay una serie de coberturas que aparecen incluidas en cualquier seguro de coche a todo riesgo. Estas suelen ser las siguientes:
- Daños propios del vehículo
- Responsabilidad civil ampliada
- Defensa jurídica
- Defensa en multas de tráfico
- Seguro del conductor
- Auxilio por retirada del carnet de conducir
- Daños personas a consecuencia de desastres naturales
- Rotura de parabrisas y lunas
- Robo o incendio del coche
Tal y como podemos ver, el seguro de coche a todo riesgo es perfecto si no queremos correr más riesgos de lo necesario.
Cuándo contratar un seguro del coche a todo riesgo
Cualquier vehículo que tenga su estacionamiento oficial en España está obligado a tener un seguro que lo cubra. Por eso, cuando vamos a contratar un seguro para el coche siempre nos planteamos la duda de si cubrirlo a todo riesgo o nos hacemos con otro tipo de seguro.
El seguro a todo riesgo es ideal para los coches caros, los nuevos o aquellos que tengan más posibilidades de sufrir golpes o arañazos. Entre estos últimos hay que citar los vehículos que duermen en la calle y no en un garaje, los que a pesar de tener garaje tienen que hacer maniobras complicadas para su estacionamiento, etc.
Al tratarse de los seguros más completos, son los que nos ofrecen una tranquilidad absoluta. Algo que quizás resulta más indispensable cuando el coche es completamente nuevo. Sin embargo, esto no es óbice para que toda aquella persona que quiera estar más tranquila contrate un seguro de este tipo a pesar de que su coche ya tenga unos años.
A este respecto, habrá que tener en cuenta la compañía en la que contratamos el seguro, ya que cada una de ellas, puede disponer de un seguro que incluya o no una serie de coberturas. No obstante, el seguro a todo riesgo, es el seguro con el que no tenemos que preocuparnos de nada, ya que existirá la posibilidad de ir incluyendo coberturas adicionales a medida que pasa el tiempo.
Resulta de vital importancia para cualquier asegurado la cobertura de daños propios. Si disponemos de ella en nuestro seguro a todo riesgo, la compañía nos va a respaldar a la hora de asumir los gastos en caso de que seamos nosotros los culpables de un siniestro.
Esto quiere decir, que un seguro de coche a todo riesgo, también resultaría interesante para aquellas personas que se sienten más propensas a la hora de tener algún percance con el coche. Un simple choque con el vehículo al aparcar en la calle o en el garaje ya nos hace responsables del problema y la compañía correría con los gastos en caso de tener un seguro a todo riesgo.
En definitiva, el seguro de coche a todo riesgo es una póliza flexible a la que podemos ir añadiendo las coberturas que más se ajustan a nuestras necesidades. Preferiblemente, es la opción ideal para aquellos que acaban de comprarse el vehículo o tienen un turismo caro o de alta gama.
En estas situaciones, aunque esto puede ser extensible a todas las demás, quizás vayamos con mucho más cuidado con nuestro coche, de ahí que necesitemos un seguro para estar totalmente tranquilos. Y es aquí donde precisamente entra en juego el seguro de coches a todo riesgo.
