La completa recuperación de Francho tras superar el covid y la vuelta de Francés una vez cumplida la sanción por acumulación de amonestaciones, sitúan a JIM ante cierto dilema. El técnico, poco amigo de cambiar cosas después de un buen resultado, afronta ahora la tarea de decidir entre dar continuidad a lo que funciona o devolver al equipo a dos pilares básicos que el alicantino ha considerado fijos desde que llegó. Porque, con JIM, Francés y Francho han sido titulares siempre, incluso, en el caso del defensa, por delante de Peybernes, fichado en el mercado invernal para liderar la retaguardia.

Al entrenador, de hecho, le ronda por la cabeza una idea a la que lleva tiempo dando vueltas de cara a cambiar de una vez la nefasta trayectoria del Zaragoza fuera de casa. Se trata de alterar el dibujo y poner el sábado en Logroño, por primera vez desde que tomó las riendas, una defensa compuesta por tres centrales. La medida pretendería dotar de mayor consistencia defensiva a un equipo que ha encajado goles en todas sus salidas salvo la primera de la temporada a Alcorcón (0-0). Y de eso hace ya seis meses.

El propio JIM viene insistiendo públicamente en la necesidad de cerrar de una vez la portería lejos de La Romareda y adquirir, al fin, la solidez que el equipo está mostrando como local con cinco victorias en los seis encuentros disputados en La Romareda con JIM y sin encajar un solo tanto salvo en la derrota ante el Alcorcón (0-1). Fuera de casa, en cambio, el Zaragoza sigue siendo, de largo, el peor de la categoría tras sumar únicamente seis puntos (ocho oficialmente por los tres puntos logrados en los despachos como consecuencia de la alineación indebida del Alcorcón en Santo Domingo). Una victoria (en La Rosaleda) y los empates en Alcorcón, Cartagena y Sabadell son la única cosecha a domicilio de un conjunto aragonés que necesita sumar fuera para hacer más factible el objetivo de la salvación.

El peor visitante

Por eso, JIM estudia disponer un Zaragoza nuevo, con más efectivos atrás, una mayor presencia en la medular, carrileros y dos atacantes. La fórmula, utilizada sin éxito por Iván Martínez en los feudos de Espanyol (2-0) y Castellón (1-0), permitiría tanto la continuidad de Peybernes como el regreso de Francés para acompañar a Jair en retaguardia, con Vigaray y Nieto o Chavarría en los carriles.

Lo que parece más seguro es el regreso al once de Francho una vez restablecido tras superar el covid. Ya se esperaba al canterano en la alineación inicial ante el Mirandés, pero JIM optó por no forzar y concederle minutos en el segundo periodo. Su entrada al campo fue determinante para sujetar al Mirandés, aunque, en su ausencia, Zapater, titular en los últimos cuatro partidos, ha sido, seguramente, el mejor del equipo. Así, quizá JIM opte por juntar a los dos aragoneses y a Eguaras en una medular que estaría integrada por tres centrocampistas puros. Los tres formaron en el centro del campo de aquel Zaragoza con tres centrales que perdió en Barcelona y Castellón.

Pero los únicos buenos resultados fuera de casa se han logrado con tres centrocampistas en el medio, ya sea en 4-1-4-1 o 4-4-2 con uno de ellos acostado en el interior. Así se ganó en La Rosaleda (con Francho, James y Eguaras) y se empató, con esa combinación, en Sabadell (1-1). También con tres en el medio (Eguaras, Ros y Nick) se sumó un punto en Alcorcón que luego se convertiría en tres.

En casa, por el contrario, los mejores resultados han llegado cuando el Zaragoza ha actuado con solo dos centrocampistas natos en la sala de máquinas, al menos, de inicio. Así ha jugado el equipo aragonés en once partidos disputados en el estadio municipal de los que solo uno (ante el Málaga) acabó en derrota (1-2). Entonces, Ros y Eguaras compartieron el eje de una medular que, en cambio, nunca ha funcionado en casa con tres mediocentros independientemente de su posición en el campo. Ni una sola victoria y tres derrotas en cuatro partidos advierten de la ineficacia de la fórmula en casa.

Ahora, a JIM le toca decidir. Si se mantiene fiel a su idea, quizá el Zaragoza que salga de inicio ante el Logroñés conserve la misma fisonomía que la del pasado lunes. Quizá el técnico opte por dar continuidad a Peybernes junto a Jair en defensa e introducir progresivamente en el equipo a Francho para facilitar su adaptación tras superar el covid. Si, en cambio, el entrenador decide cambiar para dar entrada a uno o a los dos canteranos, los tres centrales asoman como vía alternativa. En ese caso, Nieto o Chavarría y Bermejo podrían perder su sitio en el once inicial zaragocista.