Madrid. -- El Consejo de Ministros ha aprobado un paquete de diez medidas urgentes contra la violencia doméstica, entre ellas, la reasignación de 200 policías y 250 guardias civiles para proteger a las víctimas, la implicación de la policía local en la protección, e interesar a la Fiscalía para que, caso a caso, extreme las medidas de vigilancia.Estas medidas, presentadas tras el Consejo en rueda de prensa por el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, también incluyen la inmediata detención del agresor que incumpla una orden de alejamiento, e incluso prisión provisional; la elaboración de un mapa de riesgo sobre la violencia contra las mujeres y suspensión del régimen de visitas a los hijos, si se considera judicialmente.Entre las diez medidas está la consideración de las mujeres víctimas de violencia de género como "colectivo prioritario" en las políticas activas de empleo y la cobertura total de servicio telefónico y de teleasistencia para aquellas mujeres que tengan orden de protección. "Pondremos todos los medios a disposición del combate contra esta situación de violencia intolerable", ha dicho Caldera.Estas medidas urgentes se adoptan mientras el Gobierno trabaja con la "máxima celeridad y rigor" y en búsqueda del "máximo consenso" en la ley integral, ha dicho la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.