Unas 500 personas se encuentran desde las 10.30 horas en Can Vies con el objetivo de reconstruir el edificio. A las 10.00 horas han llegado a Can Batlló, donde tenían guardadas las herramientas y, ataviados con cascos amarillos, se han dirigido a Can Vies, donde se han organizado para empezar a sacar los escombros.
En el centro social ocupado se encontraban vigilando agentes de la Guardia Urbana y de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), que se han retirado inmediatamente para que los activistas pudieran formar una cadena humana de unos 20 metros para iniciar el desescombro. Los trabajos se están llevando a cabo de manera muy organizada.
El jefe de los Bombers de Barcelona ha alertado del peligro que puede suponer para las personas el mal estado de Can Vies. Los propios vecinos han organizado un perímetro de seguridad antes de empezar los trabajos.
