Los dos últimos heridos que quedaban ingresados en el Hospital Universitario de Burgos por el incendio de la casa rural de Tordómar, dos varones de 34 y 37 años, recibieron ayer por la mañana el alta hospitalaria, según informó el consejero de Fomento y Medio Ambiente de Castilla y León, Antonio Silván.

Antes de asistir a una misa celebrada en Tordómar como muestra de apoyo y condolencia a los familiares de los seis fallecidos, Silván precisó que estos dos varones permanecían ingresados porque, además de intoxicación por monóxido, también sufrían varias quemaduras. Por eso, no habían abandonado el sábado el centro sanitario junto a los otros tres heridos que sí recibieron el alta.

Silván prefirió no hablar de la marcha de las investigaciones sobre el origen del incendio porque "hoy (por ayer) es un día para el recogimiento y el apoyo a las familias".

Al oficio religioso asistió también el consejero de Presidencia del Principado de Asturias, Guillermo Martínez, quien agradeció el apoyo que está recibiendo la familia de las víctimas, y "especialmente" la ayuda que les prestaron en un primer momento los vecinos de la localidad burgalesa y que evitó que el desastre fuera aún mayor.

Por su parte, la alcaldesa de Tordómar, Inmaculada Sierra, aprovechó el oficio religioso para agradecer a todos "el respeto y cariño" que están mostrando estos días a los damnificados. Además, pidió que se deje a los investigadores trabajar y que sean ellos los que digan con precisión que es lo que ocurrió en la casa rural para que se desatara el incendio.

La familia no ha querido dar detalles sobre el momento en que se producirá el traslado de los restos de los fallecidos a Asturias.