El abogado de la familia del niño británico Ashya King, Juan Isidro Fernández, anunció ayer que se están ultimando los detalles para llevar a cabo el traslado del niño a Praga en las próximas 72 horas. "Solo quedan trámites burocráticos", indicó el letrado, quien espera que como máximo mañana pueda trasladarse al menor a la República Checa para recibir el tratamiento lo antes posible.

Fernández destacó que hay dos opciones para el traslado: un avión privado, que ya está sufragado, y que lo llevaría directamente a Praga con todas las medidas sanitarias; o que sea el propio hospital de Praga el que envíe un avión directamente a Málaga para recogerlo. El abogado se ha desplazado junto con los familiares al hospital para estudiar los detalles con la dirección del Hospital Materno Infantil de Málaga, los facultativos y el delegado de Salud de la Junta de Andalucía en Málaga, Daniel Pérez.

Fernández aclaró que el menor "siempre ha estado cuidado y muy bien atendido" en el centro sanitario malagueño --donde ha recibido sesiones de rehabilitación-- y que sus progenitores siempre han creído que el tratamiento de Praga es "menos agresivo y que va a tener más calidad en un futuro", por lo que esperan que a la mayor brevedad comience su tratamiento.

La justicia británica autorizó el viernes a los padres para viajar a Praga e iniciar allí un tratamiento. Ambos fueron detenidos en España por llevarse a su hijo sin consentimiento médico y puestos en libertad el miércoles. El Ayuntamiento de Portsmouth inició el 29 de agosto un procedimiento judicial para reclamar la custodia temporal del menor con el argumento de que Ashya, entonces en paradero desconocido, requería atención médica urgente.