Las escuchas telefónicas ordenadas por la jueza de Vielha para investigar la muerte en circunstancias extrañas del oso Cachou ha destapado una presunta red de tráfico de drogas con sede en la capital de la Valle de Aran con ramificaciones en Lérida, Vila-real y Castelló de la Plana. El descubrimiento ha permitido detener a 12 personas, entre ellas el alcalde del pueblo de Casau, Juan Berdié, acusadas por un presunto delito contra la salud pública, organización criminal y blanqueo de capitales.

Cinco de los detenidos se encuentran en prisión provisional, aunque dos de ellos podrán evitarla si pagan una fianza de 6.000 euros. El resto de detenidos siguen en libertad, pero les han retirado el pasaporte y deberán comparecer periódicamente ante las autoridades judiciales.

Casi 2 kilos de cocaína pura

Los 12 detenidos -11 hombres y una mujer- ya están siendo investigados tras descubrirse la red de tráfico de cocaína. En Castellón guardaban la materia prima para hacer la droga y pasaba por el resto de localidades, hasta que llegaba al consumidor final en la Valle de Aran. También se investiga si Berdié, quien además de ser alcalde también trabaja como taxista, habría utilizado su vehículo para distribuir la droga.

Durante las redadas en Lérida y Vielha, los Mossos han requisado 1.789 gramos de cocaína junto a 249 dosis ya preparadas para su venta y 5.000 euros en efectivo. En conjunto, y debido a la pureza de la droga, las mercancías incautadas se valoran en aproximadamente 200.000 euros.

La investigación por la muerte del oso Cachou tras consumir líquido anticongelante, que terminó con la detención un funcionario de Medio Ambiente del Consejo General de Aran por revelación de secretos y prevaricación, ha permitido descubrir la red desmantelada esta semana, ya que alguno de los investigados por el caso Cachou, consumidores habituales de cocaína, han permitido a las autoridades dar con los miembros de la red que la vendían.

En diciembre de 2020, el juzgado de Vielha levantó parcialmente el secreto de sumario. Sin embargo, mantuvo en secreto la investigación vinculada al tráfico de estupefacientes independiente a la de la muerte del plantígrado. Según fuentes próximas al caso, no existen investigados implicados en ambos delitos.