Las drogas ilegales cotizan a la baja en el mercado británico. En las calles del Reino Unido sale más cara una copa de vino que una raya de cocaína. La que en otro tiempo era una droga de lujo resulta hoy casi un 20% más barata que hace 10 años.

Un informe elaborado por el diario The Independent , con la asesoría de un grupo de abogados que investigan asuntos de drogas, constata que el gramo de cocaína se vendía a 84 euros (casi 14.000 pesetas) en 1995, mientras que hoy puede adquirirse a 67 euros (11.000 pesetas). A ese precio, la raya viene a costar unos 3,7 euros, mientras que una copa de vino en cualquier bar cuesta entre 4 y 5 euros. Estas peculiares rebajas afectan aún más a otras sustancias. El éxtasis ha bajado un 71%, la pastilla cuesta un euro y medio, la heroína ha caído un 56%, y el crack es la única droga cuyo precio no ha variado.

Más oferta, mayor adulteración del producto y la proliferación de traficantes, con la incorporación de bandas de kurdos y albaneses, explican el abaratamiento del mercado. El Reino Unido y España son los países con mayor número de consumidores de cocaína de la UE. El 2% de adultos británicos y españoles admiten haber consumido recientemente esta droga. La cifra, similar a la de EEUU, casi dobla la media del resto de la UE.