Por cada minuto de retraso en la aplicación de la desfibrilación se pierde un 10% de esperanza de supervivencia. Así reza en el decreto de Aragón, del 2006, que regula su uso. La comunidad tiene instalados a lo largo y ancho de su territorio un total de 334 desfibriladores semiautomáticos, de fácil acceso, y dispone de una web interactiva donde se puede conocer su ubicación exacta.

Solo en Zaragoza capital hay 101 aparatos de este tipo, distribuidos en colegios, centros comerciales, aeropuerto, Inditex, Ikea o Gobierno de Aragón, entre muchos otros emplazamientos.. En la provincia son un total de 86 y su presencia va en función del número de habitantes de los municipios.

Así, localidades como Alfajarín, Pedrola o Fuentes de Ebro disponen de 4 desfibriladores. También los hay en Cruz Roja, sedes de Protección Civil, la Universidad San Jorge o en las autopistas.

En Huesca capital, por su parte, se contabilizan 17, mientras que en la provincia altoaragonesa hay 54. En este caso, destaca su presencia en estaciones de esquí o el Laboratorio Subterráneo de Canfranc.

Consultorios médicos

En Teruel, la capital dispone de 10 desfibriladores, cinco de ellos a disposición del ayuntamiento. En la provincia existen 66 y destaca su presencia en el circuito de Motorland Aragón o en numerosos consultorios médicos de pueblos pequeños como Formiche Alto, El castellar, Camarena de la Sierra, o Cabra de Mora.

El Salud también ofrece, además de un atlas con la ubicación de cada desfibrilador a través de Google Maps , un documento con el número de personas acreditadas para su manejo. Toda esta información se actualiza periodicamente en la página del Salud. De hecho, los últimos datos sobre el número y señalización de desfibriladores en la comunidad se corresponden con abril y junio de este mismo año.

Por su parte, personal no médico ni de enfermería deberá disponer de una previa acreditación para el uso del aparato que obtendrá con la realización de unos cursos.

El desfibrilador tanto automático como semiautomático hace que, aplicado sobre el tórax del paciente, sea capaz de analizar el ritmo cardíaco, identificar las arritmias mortales e informar cuándo es necesario administrar una descarga eléctrica.

Al 061

Pese a que el uso del aparato es a cargo de una persona acreditada, en todo momento esta debe comunicar su acción a la central de coordinación del 061 Aragón con el objetivo de garantizar la continuidad asistencial y el seguimiento médico del paciente.

Respecto al decreto del 2006, se está a la espera de una modificación para que los técnicos en Emergencias Sanitarias en la comunidad aragonesa no tengan la obligación de realizar una formación adicional a la que ya poseen para usar desfibriladores en la comunidad. Por tanto, médicos, enfermeros y los citados técnicos estarán capacitados por norma para su utilización.