El 8% de los enfermos que necesitan un trasplante en Aragón muere en la espera

Ahora, el mayor reto es reducir hasta el 15 ó el 17% las negativas familiares para conseguir un máximo de donaciones. Un objetivo con el que el Gobierno de Aragón se sumó ayer a los actos por el XXV aniversario de la promulgación de la ley reguladora de la extracción y trasplante de los órganos.

Así lo aseguró ayer la consejera de Salud, Luisa Noeno, que pidió su solidaridad a las familias aragonesas cuando se encuentran ante la difícil decisión de dar el órgano de un ser querido para salvar otras vidas. En cualquier caso, la titular de Sanidad se mostró satisfecha por el descenso de las negativas a la donación que bajaron del 25% registrado en el 2003 hasta el 20% notificado hasta la fecha en lo que va de año.

Así, gracias a la solidaridad de 27 donantes (frente a los 38 del 2003), de enero a octubre de este año se han producido 82 trasplantes en los hospitales de la red del Salud (46 de riñón, 26 de hígado y 10 de corazón). En el total del 2003 se implantaron 102 órganos en Aragón, treinta más que en el año anterior.

UNO DE CADA MIL Junto a Noeno comparecieron el juez decano de Zaragoza, Mauricio Murillo, y el coordinador regional de trasplantes, el doctor Sánchez Miret. Según explicó este último, en la actualidad se calcula que uno de cada mil aragoneses ha recibido un órgano desde que se iniciaran este tipo de intervenciones.

Aunque la ley de trasplantes se aprobó en 1979, Aragón no realizó el primer implante de un órgano vital hasta 1986. En aquella ocasión se trató de un riñón, aunque posteriormente se incorporarían las operaciones hepáticas (1998) y cardíacas (1999). Hasta la fecha ya se han realizado 947 trasplantes.

Es el "único procedimiento médico que se basa en la concienciación y generosidad de la sociedad", aseguró Noeno, que resaltó la mayor "esperanza y calidad de vida" que ofrece esta terapia, por los avances tecnológicos.

Sánchez Miret redundó en la necesidad de "concienciar a la sociedad" de la importancia de la donación y manifestó sus "fundadas esperanzas" en que se pueda recortar el índice de negativas de las familias a este gesto solidario.

Según el responsable autonómico, "nunca se va a conseguir una aceptación del 100% por diferentes razones como pueden ser las creencias atávicas o algunas religiones minoritarias", ya que el sintoísmo no acepta esta práctica que el catolicismo y el protestantismo sí apoyan abiertamente.

VIDEO PROMOCIONAL Para hacer que disminuyan las negativas familiares, el Ministerio de Sanidad ha editado un vídeo promocional que también se distribuirá en Aragón, para su exhibición en charlas, actos asociativos... Según Sánchez Miret, el no haber manifestado en vida ese deseo pone problemas a la hora de recurrir a los familiares. Por eso animó a los aragoneses ha sacarse el carnet de donante o recurrir a cualquier mecanismo que "alivie a la familia de la pesada carga que supone esta decisión en un momento de duelo".

Sánchez Miret destacó el trabajo de los coordinadores de trasplantes encargados de dar la noticia del fallecimiento de un familiar y de pedir permiso para la extracción de los órganos, un reconocimiento que personalizó en los doctores Javier Paúl e Ignacio Elorriaga, presentes en el acto y responsables de esta labor en el Servet.

EN ESPAÑA A nivel nacional, desde que se aprobó la ley en 1979, más de 250.000 españoles han recibido un trasplante de órganos, tejidos o células. El número de trasplantes de órganos en estos 25 años ha sido de de 53.708 pacientes, de los que 35.763 recibieron un riñón, 11.529 un hígado, 4.607 un corazón, 1.226 un pulmón, 568 páncreas y 15 intestino, según informó Efe .

A ellos hay que sumar los casi 200.000 que recibieron trasplantes de tejidos o células: más de 40.000 córneas, 60.000 osteotendinosos, 27.000 progenitores hemopoyéticos, 2.000 válvulas cardíacas, mil injertos vasculares, otros tantos de piel y de membranas amnióticas, más de 400 cultivos celulares e innumerables en cirugía plástica.