La banca vuelve a apostar por el mercado hipotecario. Tras varios años de altos diferenciales y ventanillas cerradas, las entidades financieras parecen haber iniciado una nueva batalla con el claro objetivo de captar hipotecas. Desde hace un par de meses, los bancos han empezado a abaratar sus créditos para vivienda y ofrecen tipos de interés a un precio de euribor más 1,50 o 2%, unos porcentajes insólitos hace menos de un año y que están a años luz del 5% que llegó a aplicar la banca en los momentos de mayor restricción. Eso sí, para acceder a esos diferenciales la vinculación del cliente con la entidad debe ser máxima (nómina, recibos, seguro de vida, planes de pensiones...).

Tal y como destaca el presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Aragón, Fernando Baena, un claro ejemplo de que algo se está moviendo en el sector es que los comerciales de banca han vuelto a visitar las agencias de Zaragoza. "Hace cinco o seis años que ni aparecían por aquí; ahora han regresado para ofrecernos sus ofertas hipotecarias, lo que demuestra que el sector vuelve a tener interés por este mercado", subraya Baena, que opina que los bancos necesitan poco a poco volver a dar créditos para mejorar sus ingresos por márgenes.

EL PIONERO La primera entidad en abrir la veda de las hipotecas accesibles ha sido Bankinter, que ha lanzado una campaña de financiación a euribor más el 2%. En enero, se sumó el Santander con una oferta de euríbor más 1,99% para los que contraten una hipoteca antes del 30 de abril. "Desde entonces se han ido sumando el resto de bancos", reconoce Baena.

A pesar de este mayor interés por el mercado hipotecario, Baena considera que la barra libre de los créditos "fáciles para todos ya no volverá". "Eso de financiar el 100% del coste de la vivienda sin fijarse demasiado en los ingresos del cliente ha pasado a mejor vida", apunta Baena, que indica que aunque el euribor suba en un futuro --algo que no prevé hasta dentro de "uno o dos años"-- la cuota mensual con ese tipo de diferencial será "asumible" para los hipotecados.

No obstante, los consumidores ya no recurren tanto a la financiación de la banca a la hora de comprar una vivienda. Muchos recurren al apoyo de las familias y solicitan menos del 80% del valor del inmueble. Así, lo que no ha dejado de bajar en los últimos años es el importe medio de las nuevas hipotecas. Aragón es la comunidad donde más ha caído el valor del capital prestado con un descenso del 32% respecto al 2011.