Justo antes de que comenzase oficialmente la campaña de las europeas del 25 mayo, el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicó ayer su encuesta sobre estos comicios. El estudio vaticina una victoria del PP, pero por un muy escaso margen. Los conservadores, con una estimación de voto del 33,7%, lograrían 2,7 puntos de ventaja sobre los socialistas, que conseguirían el 31% de los sufragios, pero el resultado puede estar sometido a muchos cambios. Primero, porque la mitad de quienes tienen decidido acudir a las urnas aún no saben a quién apoyarán. Y después, porque en voto directo más simpatía (es decir, el porcentaje de encuestados que responde espontáneamente que secundará a uno u otro partido y los que dicen que se sienten más cercanos a determinadas siglas) el PSOE resulta vencedor. También por muy poco: 2,3 puntos.

Por detrás de los mayoritarios, que bajan considerablemente respecto a sus resultados en las europeas del 2009 (el PP logró entonces el 42,72% de los apoyos y el PSOE, el 39,33%), estarían IU, con el 9,3% de votos (5 escaños); Coalición por Europa, formada por los nacionalistas catalanes, vascos y canarios (5,5% de los sufragios y tres asientos en la Eurocámara); UPD (5,3 de apoyos y tres escaños); ERC (3,7% de votos y dos escaños); Los Pueblos Deciden, la coalición formada, entre otros, por Bildu y BNG (2,1% de apoyos y un representante en el Parlamento de Estrasburgo), y por último, Podemos (1,8% de votos y un asiento en el organismo). Sin representación en la Eurocámara se quedarían Ciudadanos y partidos de nuevo cuño como Vox.

De confirmarse este resultado dentro de 15 días, la victoria del PP sería por un margen menor que el de los comicios del 2009, cuando logró 3,39 puntos de diferencia respecto al PSOE. Y menor, también, de lo que el propio CIS reflejó en su último barómetro sobre las generales, publicado hace dos días, que consignaba que los conservadores ampliaban ligeramente su ventaja y conseguían 5,7 puntos de diferencia sobre sus principales competidores. El desenlace vaticinado por el CIS no sería un mal resultado para los socialistas, que podrían argumentar que desde las generales han acortado en ocho puntos la distancia del PP, algo que les permitiría encarar con ánimo su proceso de primarias, que se celebrarán a finales de noviembre, para elegir a su candidato a la Moncloa.