El atasco legislativo en las Cortes de Aragón ha impedido que la ley de apoyo a las familias que el Gobierno de Aragón quería aprobar esta legislatura pueda ser tramitada. Tras superar la fase de participación ciudadana el borrador del documento tendría que haberse enviado a los diputados para su votación final, pero será muy difícil que se refrende antes de que termine la legislatura.

La norma redactada por la DGA pretendía incentivar las ayudas económicas para aumentar la natalidad en el medio rural, para lograrlo se propuso facilitar las excedencias como forma de completar los permisos de paternidad. «El texto busca tener en cuenta la realidad territorial de la comunidad y servir de herramienta ante el reto demográfico», explicó la consejera de Ciudadanía, María Victoria Broto, tras la aprobación del anteproyecto de ley.

Las cuantías de las ayudas reflejadas en la norma buscaban privilegiar a las familias (de cualquier tipo) especialmente aquellas que viven en zonas «demográficamente desfavorecidas». La norma igualmente quería potencial el concepto de corresponsabilidad de género «como aspecto clave para facilitar la conciliación y refuerza la necesidad de colaboración interinstitucional y con otros agentes sociales y económicos».

Durante el proceso de participación que se desarrolló durante los meses de septiembre a noviembre del pasado año se incorporaron 151 aportaciones generadas en los talleres presenciales con colectivos relacionados con los entornos familiares y otras 143 que se recibieron por vía electrónica.