La figura de paisaje protegido no entraña las exigentes condiciones de los parques nacionales y naturales. En particular, no se limitan los usos tradicionales en estas zonas naturales. En la actualidad, solo tres áreas disfrutan de protección paisajística: el monte de San Juan de la Peña, las foces de Biniés y de Fago (ambas en la provincia de Huesca) y los Pinares de Rodeno, en la turolense sierra de Albarracín. De aprobarse finalmente, Santo Domingo será el primer paisaje protegido de Zaragoza.