Con el firme convencimiento de que Aragón sufre un «grave problema de transporte», desde Podemos-Equo quieren desarrollar, «allí donde sea posible», una red de trenes de cercanías a un precio asequible. Al hilo de este asunto, creen que es necesario que se solicite la transferencia al Gobierno de Aragón de las competencias estatales en materia de ferrocarril para tener una Red Pública de Cercanías. También quieren subvencionar en el medio rural el servicio de taxis a demanda de los vecinos. La formación mantiene su apuesta por la liberalización de la AP-68 hasta Navarra, al tener un trazado paralelo al de la N-232, y la liberalización de la AP-2. Consideran que la comunidad tiene una de las peores redes de comunicación de España, entre otros motivos, dicen, por que el déficit de inversión en las últimas décadas «supera los 600 millones de euros». Así que exigirán al Estado central que ejecute aquellas obras comprometidas y que nunca han visto la luz. Para que Aragón esté cohesionado, consideran que es esencian que existen una carreteras y un transportes adecuado.