Los transportistas aragoneses tardarán un tiempo en poder calcular las pérdidas que les están produciendo las movilizaciones y disturbios en Cataluña, agravadas por la huelga de ayer, pero sin duda serán cuantiosas. Los presidentes de la Asociación Empresarial de Transportes Discrecionales de Aragón (Tradime) y la Federación de Empresas de Transporte de Mercancías de Zaragoza (Fetraz), José Antonio Molinero y Carmelo González, respectivamente, coincidían en que sus asociados están teniendo serias dificultades para realizar su trabajo.

«Las pérdidas serán brutales», lamentaba González, que enumeraba desde el «conductor que teníamos desde ayer (por anteayer) en Andorra, y tiene que volver de vacío», a los más de 20 camiones de su propia empresa bloqueados en Barcelona, pasando por los de mercancías peligrosas, igualmente parados y los que se estaban buscando la vida por carreteras secundarias para continuar la ruta. «Nuestra asociación hermana en Cataluña nos va dando información de qué carreteras están despejadas», explicaba.

Moliner, en la misma línea, explicaba que mientras algunos habían podido efectuar sus rutas sin problemas, otros las habían pospuesto al lunes, en previsión de los problemas, y otros estaban sufriendo atascos que echaban a perder viajes. «El problema de la retención es que, con el tacógrafo, llega una hora en que ya no puedes mover el camión», explicaba el presidente de Tradime. Las pérdidas a nivel nacional, aseguraba, se estiman en 20 millones de euros diarios.

TRENES SUSPENDIDOS

Pero los problemas no solo se dieron en el transporte de mercancías, sino también en el de viajeros. Según informaron fuentes de Renfe, tres trenes fueron directamente suspendidos (dos que hacían la ruta de Gijón a Barcelona, con parada en Zaragoza, en ambos sentidos y otro AVE de la Ciudad Condal a la capital aragonesa), y sus pasajeros tuvieron que ser embarcados en los siguientes. Otros convoyes sufrieron retrasos.

En cuanto al transporte de carretera, un autobús que hacía la ruta de Huesca a Barcelona fue apedreado en Lérida, según informó Aragón TV, y tuvo que darse la vuelta, con lo que el siguiente servicio directamente se suspendió. Desde la Estación de Delicias de Zaragoza, todos los servicios hacia Cataluña circularon con normalidad, según fuentes consultadas.

En las carreteras no hubo grandes retenciones, según fuentes de Tráfico, al menos que llegasen a afectar a la comunidad.

La Delegación del Gobierno en Aragón también confirmó que no hubo incidentes en la comunidad relacionados con las movilizaciones en la comunidad vecina.