El juzgado zaragozano especializado en las reclamaciones de cláusulas suelo y otras condiciones generales de contratación de la hipoteca -como los gastos de constitución- está ya preparado para su puesta en marcha, a expensas de que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) designe un secretario judicial, o letrado de la Administración de Justicia, como se denomina ahora. El nombramiento podría tener lugar hoy mismo, tras la reunión prevista entre el CGPJ, el Ministerio de Justicia y las comunidades autónomas. Pero difícilmente se llegaría a poner en marcha en la fecha prevista, mañana, con lo que probablemente inicie su andadura el lunes, según anticipó ayer la directora general de Justicia e Interior de la DGA, María Ángeles Júlvez.

Como publicó EL PERIÓDICO, el juzgado será el Primera Instancia 12 bis, un órgano de nueva creación que, siguiendo el plan estatal del CGPJ, centralizará estos asuntos descargando a los 17 que actualmente los asumen. La avalancha de reclamaciones que experimenta la capital aragonesa justifica adoptar alguna medida, ya que proporcionalmente, es la ciudad más afectada de España. En números absolutos es la segunda, por detrás de Madrid (con 799 y 1.500 asuntos ingresados en el primer trimestre de este año, respectivamente) y por delante incluso de Valencia, con apenas 300.

DISCREPANCIAS / Otras cosa es que la solución óptima sea este plan de creación de nuevos juzgados. La previsión de crecimiento en Zaragoza es tal, con 414 asuntos ingresados solo entre el 20 de abril y ayer, que Júlvez no descartaba la creación de un segundo juzgado especializado, el que sería el Primera Instancia 12 tris (sic), y de hecho la partida presupuestaria de la DGA, de casi 450.000 euros, contempla ya esta posibilidad. Aunque habría que dar una formación especializada a los nuevos funcionarios que se designaran. El dinero también llegaría para posibles refuerzos puntuales en Huesca y Teruel, si se necesita.

Algunos colectivos judiciales, no solo abogados especializados sino los jueces decanos como colectivo, vaticinan que el sistema está abocado al desastre, ya que estos juzgados nacerán colapsados al recibir todos los asuntos hasta ahora repartidos. Al menos en Zaragoza, a falta de secretario judicial, los medios personales (un juez sustituto en la recta final de su formación, un gestor, dos tramitadores y un funcionario de auxilio) y materiales (espacio físico, mobiliario y equipos informáticos) ya están listos. En otros partidos judiciales, lamentaban los jueces decanos en un comunicado conjunto hecho público ayer, ni siquiera eso.

Júlvez confiaba en que, al igual que pasó con los juzgados creados en Galicia a raíz de las reclamaciones de las preferentes bancarias, la unidad de criterio del juez haga que las sentencias se dicten con más agilidad -al fin y al cabo, los casos son calcados y, en Aragón, mayoritariamente de Ibercaja, heredadas de CAI- y, a la postre, disuadan al banco de reclamar por la carga de las costas. Una comisión de seguimiento de la DGA y el CGPJ analizará el devenir del asunto.

Tendrá que ver cómo evoluciona el ingreso de causas, tanto en las cláusulas suelo como en frentes más recientes, como los gastos de hipoteca. En principio, estos nuevos juzgados serán de vida corta, hasta diciembre.