En el restaurante El Teatro (calle Mayoral 32), hay un rincón para descubrir la gastronomía marroquí en Zaragoza. En este establecimiento familiar, que va a cumplir 8 años abierto en el barrio del Gancho, participan hasta 6 miembros de la familia.

“Mis padres llevan más tiempo en Zaragoza, antes estaban en Francia y después fueron a Huesca por un hermano de mi padre”, explica Fátima Khaadi, una de las hijas y que lleva ya 15 años en la capital aragonesa. Del restaurante destaca “el ambiente”, ya que es un punto de reunión para los árabes del barrio, sobre todo por las tardes, ya que es donde acuden cuando salen del trabajo.

Restaurante El Teatro: un rincón para la gastronomía marroquí en Zaragoza Miguel Ángel Gracia

En El Teatro, los viernes son un día marcado en rojo en el calendario y es cuando se sirve uno de los productos estrella del local, como es el cuscús, un plato “tradicional en Marruecos después de rezar”, pero que atrae a público de todo tipo. Por ello, “es un momento de mucho jaleo y si no vienen pronto, se acaba”.

Al frente de esta preparación está su madre, Mouna, que aprendió a prepararlo desde pequeña. Más que conocimientos de “un chef”, es una tradición. “Desde los 11 años también me ha enseñado a hacerlo”, explica su hija, sobre una receta que va de generación en generación. Este plato recoge el espíritu del restaurante, que gira en torno a la “comida casera, sencilla y no tan moderna”, pero que sirve para que la gente de Marruecos “se sienta como en casa” y al resto les haga viajar hasta el país marroquí.

Restaurante El Teatro: un rincón para la gastronomía marroquí en Zaragoza Miguel Ángel Gracia

Esto se consigue con el ambiente, la presentación de los platos, “que es como en Marruecos”, y la propia comida, con las especias como uno de sus elementos característicos. “Si la saboreas es como estar allí. Se distingue por eso”, cuenta.

De la carta, destaca los tahini de verduras y el pollo. También el té, al estilo de Marruecos, “porque en cada país árabe es diferente” y que se sirve acompañado de azúcar y hierbabuena. “Tenemos capacidad de hacer muchas cosas pero nos centramos en eso”, explica, y es que trabajan al día con el género, de la mano de algunos comercios de la zona, lo que da cuenta de su sinergia con el barrio. Guardan relación con otro de los puntos más emblemáticos de la zona, el Teatro del Mercado, que les da nombre y habitualmente también clientes, con los actores y los trabajadores que acuden por las noches.  

El ajetreo que experimenta el local y las mesas ocupadas son una buena señal para El Teatro, que no descartan ir aumentando el volumen de negocio abriendo el sótano con el que cuenta el local. Por ahora, prefieren ir "poco a poco" y tienen claro que deben seguir su receta de sencillez y familiaridad para continuar creciendo.