La celebración de Halloween trae a miles de hogares en Aragón disfraces y complementos no habituales tanto para menores como adultos que pintan sus rostros con maquillajes y lentillas de fantasía con la intención de aterrorizar a la multitud por las calles de todas las localidades de Zaragoza, Huesca y Teruel.

Para que la noche del 31 de octubre sea inolvidable sin que surja ningún problema de salud inesperado, la Unión de Consumidores de Aragón (UCARAGÓN) ha reunido una serie de consejos y recomendaciones, la gran mayoría sanitarios, para el consumo adecuado de estos productos.

El precio de los disfraces no ha variado en los últimos años, pero antes de decidir qué traje, máscara, maquillaje o lentillas de fantasías comprar hay que asegurarse de que sean seguros y sigan la normativa vigente porque hay que recordar que la piel y los ojos son para toda la vida.

Desde UCARAGÓN recomiendan la confección propia de los disfraces porque se trata de la opción más original, creativa, divertida y económica en comparación con los equipamientos ya confeccionados. Si finalmente decides comprarlo en un comercio, la asociación aconseja guardar el ticket de compra por si es necesario realizar una reclamación.

Dos niños disfrazados para Halloween PIXABAY

¿Qué debes tener cuenta a la hora de comprar un disfraz?

  1. Los disfraces destinados a menores de catorce años son considerados juguetes y deben cumplir con la normativa específica de estos productos. Es importante tenerlo en cuenta porque máscaras, disfraces y maquillajes de Halloween son productos que aparecen frecuentemente en la red de alerta de AESAN al no cumplir todos los requisitos de seguridad.
  2. En su etiquetado debe indicarse la marca CE, que garantiza que los tejidos tienen un tiempo más lento de combustión. Debe indicarse la edad recomendada, especialmente si son destinados a menores de 3 años y, en el caso de que sea necesario, debe incluir las advertencias en su utilización y los datos de identificación del fabricante o responsable del producto.
  3. Los disfraces para adultos deben cumplir el etiquetado de las prendas textiles, indicando nombre, dirección y el NIF del fabricante, comerciante o importador, número de registro industrial en el caso de prendas fabricadas en España y composición del producto.
  4. Las máscaras y pelucas han de disponer de aberturas de un tamaño adecuado para evitar riesgos de asfixia. Comprobar los orificios de boca, nariz y ojos. Han de incluir el etiquetado completo, en castellano, y han de estar realizadas con materiales no inflamables.
  5. Las lentillas de colores de fantasía se adquieren con gran facilidad a través de Internet, bazares, y otros establecimientos no autorizados, sin que exista "ningún tipo" de garantía sanitaria. El uso de este tipo de lentillas de fantasía puede producir una sensación de sequedad y arenilla en los ojos, enrojecimiento, irritación e, incluso, dolor al retirar la lente. Asimismo, otros riesgos asociados con un uso inadecuado incluyen conjuntivitis, inflamación corneal, reacciones alérgicas, abrasión corneal derivada de una adaptación deficiente y pérdida visual.

Control del maquillaje

Hay que tener especial precaución al adquirir productos cosméticos destinados al maquillaje, sobre todo los que se venden en bazares y tiendas de bajo coste, porque existe el peligro de que estos productos no hayan sido sometidos a los controles dermatológicos adecuados y produzcan alergias y reacciones en la piel, bien porque sean de imitación o falsificados.

Los productos cosméticos a la venta en España deben adecuarse a lo establecido en el Real Decreto 1.599/1997 de 17 de octubre sobre productos cosméticos. Las empresas españolas que fabrican estos productos deben contar con autorización de la Agencia Española del Medicamento.

Dos jóvenes maquilladas para la noche de Halloween PIXABAY

El etiquetado

Te puede interesar:

Recuerda que el etiquetado del maquillaje que vayas a emplear en tus disfraces debe indicar:

  • Denominación del producto.
  • Nombre o razón social ya la dirección o domicilio social del fabricante o del importador, así como del responsable de la puesta en el mercado.
  • El contenido nominal, salvo para envases de menos de 5 gramos o de menos de 5 mililitros.
  • Fecha de caducidad.
  • Las precauciones de empleo y advertencias de uso.
  • El número de lote de fabricación.
  • El país de origen (en caso de fabricarse fuera de la UE).
  • La función del producto.
  • Lista de ingredientes.