Nadie está a salvo de un cambio de vida totalmente drástico. A principios de siglo la actriz Mónica Cervera estaba en la cresta de la ola, ya que estuvo nominada al premio Goya por su papel en 'Crimen Ferpecto'. Después pasó por numerosas series de televisión, incluida 'La que se avecina', una de las más queridas y seguidas por los telespectadores, pero ahora vive en la calle.

Concretamente lo hace en un banco de un parque de Marbella, su lugar de nacimiento. Ahí trata de cobijarse del frío lejos de los focos y de las cámaras que durante tanto tiempo le persiguieron, tal y como contó la revista 'Semana'.

A la revista le ha contado que no quiere saber absolutamente nada de su vida pasada en el cine y la televisión y que no necesita a nadie para salir de esta situación: "No quiero que me nombren la palabra televisión ni cine. Estuve ahí en su día, pero no quiero volver nunca. Estoy bien como estoy, no quiero hablar de ese pasado", ha asegurado. Y también ha pedido que la "dejen en paz", ya que ella ha elegido vivir esta vida.