Desde que los periódicos tienen versión online, ofrecen un ránking de las noticias más seguidas. Inexorablemente los primeros lugares suelen ocuparlo noticias relacionadas con el fútbol. ¿Lo han visto? Casi por unanimidad. Incluso vinculadas a este Real Zaragoza tan decepcionante. Lo digo porque me resulta inquietante. Que en momentos como el actual, cuando se nos cercena la salud o el trabajo, haya un alto porcentaje de ciudadanos que tienen en el fútbol toda su preocupación, me choca. Lo pudimos comprobar el otro día, cuando apareció Leo Messi en los juzgados de Gavá, donde iba a declarar por haber estafado a Hacienda, que luego nos paga la asistencia médica, una gran cantidad de dinero. Yo supuse que el futbolista iba a recibir un gran chorreo por la multitud que lo aguardaba, pero no, fue aclamado con aplausos y ánimos, como si en el fondo fuese un pobre hombre que ha sido estafado por el Estado. Era al revés.

Estos gestos son dibujos muy precisos del país donde vivimos, más que los índices de los sesudos sociólogos. La ciudadanía sigue viviendo de espaldas a la realidad, ausentándose en actividades que solo deberían ayudarles a llenar su ocio, no a ser el motor de sus vidas. Aplaudir a un defraudador, porque es un ídolo deportivo, es inquietante. Se ha aplaudido también a regidores que han hecho gala de su desfachatez. ¿Qué pasa, no existe suficiente información sobre estos individuos, para saber quiénes son? ¿De verdad no sabemos que el que roba a Hacienda nos roba a todos?