El ministro de Educación y Cultura, José Ignacio Wert, sigue con su política errática. Ayer otra vez tuvo que recular (la última vez fue con las notas para las becas) y aplaza ahora al próximo curso la supresión de las ayudas para el programa Erasmus que afecta a numerosos universitarios (774 aragoneses) tras la polémica abierta al conocerse la noticia. Una medida que se publicó en el Boletín Oficial de Estado, sin más publicidad, y a mitad de curso, lo que evidencia unas formas políticas lamentables. Pero además, la decisión supone un retroceso en la política educativa, como le recordó ayer mismo la Comisión Europea, abriendo solo la posibilidad de cursar estudios universitarios fuera de España para las familias más pudientes. La política de siempre de este ministro y de buena parte del PP. Pero tanto revés no debe quedar impune. ¿Qué necesita el presidente Rajoy para decirle a Wert que deje la cartera ministerial de una vez? Por higiene política y social, el Gobierno popular debería ser consciente que la presencia de este ministro solo resta. De todo. Salvo que el objetivo sea cargarse definitivamente la educación en España.