CRUCE DE CAMINOS

Un imán para el talento

La idea de crear un centro aragonés para atraer profesionales muy cualificados es ilusionante pero pasa por ofrecer buenos salarios

Ricardo Barceló

Ricardo Barceló

La retención y atracción de talento es uno de los grandes retos de las empresas en un siglo XXI que ha dado la vuelta al mercado laboral como un calcetín. Los departamentos de recursos humanos han cambiado las directrices tradicionales para tratar de conquistar a trabajadores que destacan por sus conocimientos y cualificación, pero también por su capacidad para trabajar en equipo, sus dotes de comunicación y su liderazgo. Un reciente informe de Randstad calcula que en España se quedan sin cubrir casi el 10% de los empleos mientras que el 80% de las empresas reconoce tener dificultades para encontrar los perfiles que buscan. Pero no existen varitas mágicas. ¿O sí?

El presidente aragonés, Javier Lambán, anunciaba el pasado jueves, durante su intervención en la primera jornada del debate sobre el estado de la comunidad, que impulsará un Centro Aragonés del Talento en la capital aragonesa. Será, según apuntó, una segunda plataforma de atracción de riqueza, similar a la que supuso la Plataforma Logística de Zaragoza (Plaza) en su día. Para ello, la DGA prevé crear una entidad mixta, con organismos y fondos públicos y privados, capaz de aglutinar a instituciones, empresas punteras, centros de innovación, a las universidades y a entidades financieras. Lambán, a quien hace tiempo que le preocupa la falta de profesionales cualificados para dar respuesta a potenciales empresas que prevén invertir en Aragón, confía en crear un «ecosistema de conocimiento». Su sueño es fomentar la captación de talento, ayudar a trabajadores y directivos a atraer profesionales para que vivan y trabajen en Aragón gracias a la simplificación administrativa y el acceso a suelo en condiciones favorables, entre otras cuestiones. 

La idea es atractiva, pero para llevarla a efecto será necesario un requisito que Lambán no citó: ofrecer buenos salarios y condiciones atractivas para que el talento no solo se quede en esta tierra sino que venga de otras comunidades y países. Esta condición, sin embargo, hoy no se da de forma generalizada. 

Para atraer talento será necesario un requisito que Lambán no citó: ofrecer buenos salarios y condiciones atractivas para que el talento no solo se quede en esta tierra sino que venga de otras comunidades y países

Muchos de los investigadores y profesionales que salieron de Aragón durante la crisis de 2008 todavía ni se plantean regresar. Y no es porque no quieran sino porque nadie es capaz de pagar lo que valen. Y ese es el quid de la cuestión. Para que Aragón logre atraer talento necesita que se dé un cambio de mentalidad en su tejido empresarial. Hay excepciones, por supuesto, pero son pocas. En el caso de que se diera este requisito sería necesario incidir de una forma mucho más decidida en potenciar la formación, no solo en la Universidad sino también en los centros de trabajo. Fomentar la flexibilidad en los horarios, la conciliación de la vida laboral y familiar, impulsar la cultura empresarial, ofrecer unas expectativas a futuro y trabajar en entornos laborales donde la comunicación sea un valor son algunas de las claves que permiten atraer talento. Y esas condiciones, en general, no se dan en la mayor parte de las compañías aragonesas. No obstante, Zaragoza tiene un potencial evidente para conseguir ser imán de profesionales cualificados. Su equidistancia entre Madrid y Barcelona, la mejor calidad de vida, unos precios de la vivienda asequibles y una oferta de ocio y cultura atractivas son bazas con las que ya cuenta la capital aragonesa.  

Zaragoza tiene potencial para conseguir ser imán de profesionales cualificados. Su equidistancia entre Madrid y Barcelona, la mejor calidad de vida, unos precios de la vivienda asequibles y una oferta de ocio y cultura atractivas son sus bazas

La revista Forbes publicó hace poco más de dos meses la lista de las personas más creativas en el mundo de los negocios en 2022. En ella figuran tres aragoneses: el cofundador en Imascono y Chromville, Pedro Lozano, el cofundador de Apadrina un Olivo, José Alfredo Martín, y la ingeniera de Big Data de Telefónica, Laura Lacarra. Son tres ejemplos, pero la nómina de talento made in Aragón es muy amplia. La directora de Itainnova, Ester Borao, y las CEO de Libelium y Bitbrain, Alicia Asín y María López, respectivamente son también ejemplos del potencial de capital humano que hay en Aragón. Quizá ellos y ellas también tengan algo que decir.

El anuncio realizado por el presidente Lambán en las Cortes de Aragón resulta esperanzador. Habrá que confiar en que no sea tan solo un anuncio.