LaLiga quiere volver a entrenar el lunes día 4

El regreso del fútbol profesional está cada vez más cerca. España está en el llamado proceso de desescalada, un concepto muy acuñado en los últimos días por políticos y expertos para definir la mejoría de la epidemia en el territorio nacional. De todos modos, ahora se está mejor, pero no bien, por lo que el objetivo es que cuando el balón vuelva a rodar en los estadios sea porque la situación es palpablemente mejor todavía. Con todas las precauciones habidas y por haber, pero al menos el deseo es que se acabe la temporada y, además, en los plazos previstos inicialmente. Es decir, el 31 de julio.

El pacto de Viana entre Irene Lozano (Consejo Superior de Deportes), Javier Tebas (LaLiga) y Luis Rubiales (Real Federación Española de Fútbol) ha pegado un acelerón al retorno del balompié. Había unas líneas maestras, que en los últimos días han ido cogiendo cuerpo, aunque es necesario esperar a Sanidad, máxima autoridad en este caso. La situación invita al optimismo sobre la vuelta del fútbol.

La idea de LaLiga era empezar a entrenar el 4 o el 11 de mayo y finalmente será la primera fecha si se cumple lo que patronal pretende. Anunció Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, en su comparecencia del pasado sábado, que si los datos acompañaban el próximo 2 de mayo se podría salir a hacer deporte de forma individual y en horarios concretos, lo cual abre la puerta de par en par a la vuelta al trabajo de los futbolistas. Obviamente, al principio, de forma individual y atendiendo al protocolo de LaLiga.

Eso conlleva también que antes de retomar la acción sobre el césped y de que los jugadores puedan volver a tocar balón deban pasar los pertinentes test para saber si están libres de coronavirus. Sanidad retrasó una semana la realización de las pruebas y aún no hay luz verde. Cada comunidad autónoma comunicaría el momento de hacer los test a los equipos en base a las instrucciones de Sanidad.

Sobre ello, este lunes hubo un encuentro telemático entre David Aganzo, presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) e Irene Lozano en el que el exfutbolista trasladó la necesidad de volver «con un protocolo que garantice la salud» y se reiteró que, al ser un tema de salud pública, «todas las decisiones que se tomen desde los organizadores y operadores de la competición del fútbol serán previamente autorizadas por el Ministerio de Sanidad, en todo lo que tiene que ver con el protocolo de la salud».

El 18 de mayo es la fecha establecida, si todo marcha como está previsto, para comenzar a entrenar por grupos y, el 1 de junio, se juntarían todos los miembros de la plantilla para ejercitarse de forma normal y terminar esta nueva pretemporada antes del primer partido de Liga, que sería a mitad de junio. Más adelante, cuando se sepan fechas definitivas, se establecerá el protocolo, las normas concretas y el calendario con las fechas de los once encuentros que faltan por disputarse en Primera y Segunda.

Voces dispares

España ha ido a la zaga un par de semanas de Italia en términos de casos y fallecimientos, aunque con matices. En el caso del regreso del fútbol, en el país transalpino los entrenamientos van a volver el 18 de mayo, es decir, dos semanas después de lo que quiere LaLiga. En Italia, el día 4 lo harán los deportistas de disciplinas individuales, pero los de equipo, como el fútbol, el 18, aunque es una decisión que ha generado controversia.

En España también hay voces dispares, favorables y en contra. Por ejemplo, Jaume Roures, propietario de Mediapro, señaló que lo primordial en estos momentos «es acabar esta temporada porque es donde estarán las pérdidas económicas». Por su parte, el exzaragocista Leandro Cabrera (Espanyol) resaltó que «no merece la pena jugarnos la salud por dinero». Anteriormente, por ejemplo, Fali (Cádiz) ya aseguró que sin garantías totales no iba a volver a entrenar ni jugar y Peru Nolaskoain (Deportivo) afirmó este lunes que «de momento creo que no hay garantías y por eso hay que esperar un poco a que mejore todo. Empezar con los entrenamientos individuales me parece bien, pero la prioridad la tienen los que están en primera línea».