Al vestuario zaragocista no le sirve el empate en el encuentro que enfrentará, el sábado, al equipo aragonés con el Espanyol en La Romareda. A los catalanes les basta un punto para certificar de manera matemática su ascenso a Primera, pero el Zaragoza no acepta el pacto. Al menos, eso asegura Sergio Bermejo, que tiene claro que la delicada situación clasificatoria impone salir a por la victoria. "Con lo que nos estamos jugando tenemos que ir a por la victoria y salir con el cuchillo entre los dientes desde el primer minuto. No nos vale otra cosa que los tres puntos", afirma el madrileño.

Para ello, el Zaragoza apela a su notable rendimiento ante los favoritos, a los que ha puesto en dificultades en La Romareda. "Hemos demostrado que contra los de arriba hemos hecho grandes partidos, así que debemos centrarnos en nosotros mismos y conseguir los tres puntos. Ellos están luchando por sellar cuanto antes el ascenso directo, pero nosotros por salvarnos y debe ser un partido en el que mostremos esas ganas y esa actitud por ganar. Y creo que se va a ver", sostiene Bermejo, que subraya la solvencia exhibida por el Zaragoza en casa desde que llegó JIM. "Necesitamos seguir haciéndonos fuertes en La Romareda, también ante un Espanyol que es un equipo muy compacto y con una gran pegada. Tienen al máximo goleador de la categoría (De Tomás), pero también puntos débiles y vamos a trabajar para atacarlos el sábado".

A solo tres puntos del descenso después de las victorias, el lunes, de Sabadell y Alcorcón, el Zaragoza afronta el choque ante el líder con la obligación de mantenerse firme para no regresar al borde del abismo. "Los resultados no nos beneficiaron, es verdad, pero tenemos que mirar a nosotros mismos y afrontar cada partido con la idea de ganar para salvarnos lo antes posible", indica el centrocampista, cuyo nombre pasará a la historia como el jugador que asistió a Cristian para que el portero marcara en el último instante del duelo ante el Lugo. "Cuando levanto la cabeza para poner el balón veo que los jugadores del Lugo que son más potentes en el juego aéreo están en el primer palo, así que intento ponerlo al segundo para que entre algún compañero y remate. Y por ahí aparece Cristian. Estoy muy contento por él y por el equipo aunque el sabor que deja el empate es agridulce porque el equipo lo hizo bien y no se vino abajo con su primer gol".

De hecho, Bermejo valora la capacidad de reacción del equipo cuando el rival se volvió a adelantar con el 2-1. "El equipo pudo venirse abajo, pero hicimos lo contrario. En la segunda parte encerramos al Lugo en su área y creamos varias ocasiones. La actitud fue muy buena y en este tramo de la temporada tenemos que ser fuertes porque los partidos se pueden poner cuesta arriba".

En el plano personal, el madrileño se muestra satisfecho de su primera temporada en el fútbol profesional aunque espera que la próxima la lucha sea por un objetivo diferente. "La valoración es positiva en cuanto a minutos jugados. Estoy muy contento con la confianza que me está dando el míster y espero que la próxima temporada estemos luchando por otros objetivos".