Cuatro victorias seguidas y una dinámica de crecida en el Real Zaragoza hacen que sea inevitable echar cuentas con una promoción a siete puntos tras haber alejado de forma definitiva el fantasma del descenso. JIM se esfuerza en señalar el mensaje del partido a partido, la mirada en Cartagena este sábado, pero sabe que el Zaragoza va a más y que es su momento. “Queremos celebrar tres puntos que necesitamos a tope. Ahora sí que los necesitamos para lo que queremos, hace cuatro semanas eran para otras cosas”, señaló el entrenador, a medio camino entre el deseo de atrapar una meta que parecía imposible y la conciencia de que no puede echar las campanas al vuelo ni dejarse llevar por la euforia. “Es verdad que de reojo vas mirando, pero no podemos confundirnos. Al final por ver más allá de un partido te puedes pegar la leche. No quiero ser monótono ni repetirme, buscamos solo el próximo encuentro”, insistió. 

"Nuestra irregularidad nos ha impedido estar arriba. Ahora, queremos mantener la dinámica y dependemos de muchas variables. Lo único que depende de nosotros es pelear en Cartagena y ganar, ese es nuestro objetivo"

Un Zaragoza que ha sido durante gran parte de la temporada la viva imagen de la irregularidad sabe que tiene que hacer una recta final perfecta, con no menos de siete victorias en 11 partidos, para optar a ese sueño. "Dije que no vine a Zaragoza solo a salvarlo de Segunda B, pero la igualdad de la categoría y nuestra irregularidad, porque lo hemos sido mucho para tener ese objetivo en esa zona alta, nos ha impedido estar ahí. Ahora, queremos mantener la dinámica y dependemos de muchas variables. Lo único que depende de nosotros es pelear en Cartagena y ganar, ese es nuestro objetivo”, dice JIM, que tampoco descarta ser el tapado en esta recta final, el equipo que llega desde atrás y atrapa la promoción y que al final acaba subiendo, como hace dos temporadas fue sin ir más lejos el Elche. “Ojalá seamos el tapado, pero queda mucho y ojalá se me pregunte por esto en mayo. Hay que ser honestos y ver que la buena dinámica no nos está dando para corregir el déficit de toda la temporada”.

"Se me aguantó contra viento y marea. Ojalá seamos el tapado, pero queda mucho y ojalá se me pregunte por esto en mayo. Hay que ser honestos y ver que la buena dinámica no nos está dando para corregir el déficit de toda la temporada”

Ese mensaje mezclado de prudencia y contención, pero también con la intuición de que hay posibilidades de llegar no le hace olvidar a JIM los malos momentos, porque “se me ha visto mucho la cara aquí sin hacer buena campaña. Se me aguantó contra viento y marea”, recordó, echando la mirada atrás, a hace solo un mes, cuando el equipo llegó a estar a cuatro puntos del descenso. “Hablamos muchas veces de jugadores que pasan por el Zaragoza y ven la presión añadida de esta camiseta. Hubo futbolistas muy buenos que su rendimiento aquí no lo fue. Ahora, la presión de mirar abajo nos la hemos quitado, pero no tenemos que despistarnos ni hacer cuentas de la lechera deseando que pinche el otro”, incidió, recordando las muchas victorias que aún les hacen falta.

El trampolín de su carrera

En todo caso, en Cartagena les espera un rival directo, un enemigo fuerte en el Nuevo Cartagonova, que “ha hecho un porcentaje alto de sus puntos en casa (28 del total de 43 que lleva), pero es un equipo que tiene un potencial ofensivo muy bueno. Tiene jugadores diferenciales. Lo de Rubén Castro es de libro, con esa edad que siga metiendo tantos goles. Esa afición achucha y disfruta, pero esperamos darles el susto y nosotros necesitamos de verdad esos tres puntos”, incidió, antes de un partido en el que regresa a la que fue su casa en dos etapas, una en Segunda B (04-06) y otra en la categoría de plata (09-11): “A ese club le tengo que agradecer muchísimo, es especial, el trampolín en mi carrera”.

"Hay que estar alerta, la dinámica tan positiva no nos tiene que relajar, al contrario. Los jugadores en los entrenamientos me transmiten eso, entrenando así voy muy tranquilo a Cartagena"

Sin embargo, el corazón quedará al margen este sábado y JIM pide a sus jugadores “estar alerta, la dinámica tan positiva no nos tiene que relajar, al contrario. Los jugadores en los entrenamientos me transmiten eso, si trabajamos como el miércoles, por ejemplo, voy muy tranquilo a Cartagena”, dijo, para ganar y para celebrar así de la mejor manera los 90 años del Zaragoza que cumple este viernes, lo que “no deja de ser una alegría enorme para el zaragocismo con todo lo que hemos sufrido estos años”.