El Real Zaragoza, en tierra de nadie en la Liga, sin apuros con el descenso y a ocho puntos de la promoción cuando quedan 30 por jugarse, va a vivir meses frenéticos con los cambios institucionales y en el proyecto que supondrá la llegada del grupo inversor que comandan los hermanos Mas, Jorge y José. Raúl Sanllehí debe nombrar un nuevo director deportivo y también habrá nuevo integrante en el banquillo para un cambio notorio en el vestuario, una revolución que tiene sobrecarga en su punto de partida, porque hasta 32 jugadores pueden tener contrato el 30 de junio con el Real Zaragoza.

El nuevo director deportivo

Miguel Torrecilla y Juan Ignacio Martínez tienen contrato, en principio y salvo giro notable, hasta junio. Sanllehí no tiene tomada ninguna decisión sobre el director deportivo, y por tanto sobre el entrenador, y lo hará una vez desembarque, pero parece muy poco probable la continuidad de Torrecilla y, en consecuencia, la de JIM. Por no decir imposible. Con el nuevo secretario técnico y con Sanllehí como CEO y director general ejecutivo habrá que armar una plantilla con un mayor margen salarial y en la que el nuevo ejecutivo ya ha llamado de manera preliminar y solo informativa a alguna puerta, como la del Barcelona, casa en la que estuvo desde 2003 hasta 2008 en Marketing y después hasta 2017 como jefe de Fútbol, en una charla inicial desvelada por 'Sport' y que apunta a tener continuidad en los próximos meses y probables frutos con cesiones.

Las tres cesiones con final

En el Zaragoza acaban sus cesiones el 30 del junio Borja Sainz (Alavés), Nano Mesa y Álvaro Giménez (Cádiz), este último con opción de compra obligatoria en caso de un ascenso, una hipótesis lejana. Ninguno de los tres, salvo sorpresa, tiene posibilidades de seguir. En 2023, mientras, acaban contrato hasta 17 jugadores. Muchos de ellos ya saldrán este verano.

En 2023 acaban Cristian, Ratón, Vigaray, Gámez, Jair, Lluís López, Lasure, Zapater, Vada, Petrovic y Narváez, además de los que regresan de cesiones, Ros, Larra, Marc Aguado, Bikoro, Vuckic y James

Cristian Álvarez, Ratón, Vigaray, en blanco por ahora esta temporada por su lesión de rodilla, Lasure, Zapater, Fran Gámez, Jair, Lluís López, Vada, Petrovic y Narváez son los de la actual plantilla. Lluís López tiene un año más opcional y Fran Gámez si juega 50 partidos entre esta temporada y la próxima, una meta que tiene en la mano. El caso de Vada es más peculiar, firmó hasta 2023 con una prórroga automática un año más que el jugador tiene la opción de romper de forma unilateral. Juanjo Narváez, un jugador que ha bajado su cotización pero con cartel, es carne de traspaso este verano si no renueva, aunque nada se le ha ofrecido aún para ello. 

Además, con contrato deben regresar de sus cesiones Larra, de buen curso en el Amorebieta, Javi Ros, que ha recuperado sensaciones en el club azulón desde enero, Marc Aguado, de estupendo nivel en el Andorra, Bikoro, que ha tenido sitio en el Hércules, Vuckic y, ya en diciembre, James Igbekeme. Bueno, el caso de los dos últimos es especial. El Rijeka tiene una opción de compra con Vuckic, que ha recuperado tono en la Liga croata, y, si no la ejecuta, hay un pacto tácito para, en su regreso, rescindir el año que le queda. Y algo parecido sucedería con James, que solo ha jugado 30 minutos en las 4 primeras jornadas de la MLS con el Columbus Crew, donde está cedido hasta final de este año. Los dos más que probablemente no volverán a vestir la elástica zaragocista.

Francho, Francés, con ofertas para renovar, Nieto, Chavarría, Bermejo, Azón y Eugeni acaban en 2024 y también los que regresan de préstamo, Buyla, Baselga y Clemente

En el 2024 acaban contrato Alejandro Francés y Francho Serrano, ambos cotizados y con cartel, sobre todo el central y los dos con una oferta de renovación y mejora muy lejana al acuerdo por ahora, Nieto, Chavarría, que ya tuvo opciones de salida el pasado verano, Bermejo, Iván Azón y el recién llegado Eugeni. Además, deben regresar de sus cesiones Marcos Baselga, de protagonismo irregular en el Zamora, Jannyck Buyla, sobre el que el Nástic tiene una opción de compra obligatoria en caso de ascenso a Segunda y que ha tenido minutos en tierras catalanas, y Enrique Clemente, indiscutible en el Sanse desde su llegada en enero. La opción de compra del central es de cero euros y en caso de permanencia en Segunda del filial de la Real es seguro que seguirá allí. Si bajan, no hay tomada una decisión, aunque es probable su continuidad en Anoeta.

Sabin Merino y Grau acaban en 2025, Carbonell y Azón regresarán de sus cesiones en dinámica del primer equipo y Puche puede tener contrato en breve por partidos jugados o este verano

Además, en el 2025 acaban Sabin Merino y Jaume Grau, ambos fichados en enero, mientras que Luis Carbonell y el meta Carlos Azón regresarán de sus cesiones al Madrid y al Tarazona en dinámica del primer equipo. El delantero, una de las joyas de la cantera, se marchó a la 'Fábrica' con una opción de compra de 1,5 millones que el club blanco no va a ejecutar. Ni ha debutado en el Castilla y ha jugado de manera muy discontinua en el juvenil. Carbonell volverá tras renovar en agosto por cuatro temporadas. Restaría el caso de Miguel Puche, ahora habitual para JIM. Si juega cuatro partidos más de titular (lleva uno) o más de 45 minutos firmará contrato con el primer equipo y si no lo hace es más que factible que se le haga ese vínculo en verano, aunque Torrecilla no ha hecho todavía ninguna propuesta en ese sentido al futbolista.