Tres arzobispos, Ricardo Blázquez, de Valladolid; Carlos Osoro, de Valencia, y el castrense, Juan del Río, lideran la quiniela para sustituir a Antonio María Rouco Varela al frente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), que se reúne a partir de este martes para la elección. Los tres prelados se encuentran dentro del perfil renovador sugerido por el Papa -pastores más abiertos y con un rostro más amable- la semana pasada en Roma a los obispos españoles. En cualquier caso, lejos de la línea ultraconservadora marcada por el cardenal de Madrid, que ha dirigido la jerarquía católica durante 12 años con mano de hierro batallando contra el laicismo, el matrimonio homosexual, el aborto y el divorcio exprés.

"No esperen que la elección se haga aquí. Ustedes presenten al candidato", indicó Francisco a los 80 prelados con derecho a voto que a partir de mañana renovarán todos los cargos para el trienio 2014-2017, excepto el de secretario general, que ocupa desde el pasado noviembre el sacerdote del Opus Dei, José María Gil Tamayo. El Papa trató la cuestión en Roma de un modo sutil, respetando la autonomía de la CEE, pero dejó clara la apuesta por la «renovación espiritual y misionera», sin excluir a nadie, ni enrocarse en la soledad del mando. Algo muy distinto del estilo de Rouco.

Sin progresistas

Cada votación irá precedida de una de tanteo. El elegido necesitará la mayoría absoluta, es decir, la mitad más uno de los sufragios. Algo difícil en unas elecciones secretas, sin campaña ni programa electoral y sobre todo -según algunos observadores- en una CEE moldeada durante los mandatos de Juan Pablo II y Benedicto XVI a imagen y semejanza de Rouco. Esto es, con a lo sumo algunos moderados.

Como jefe de filas de estos figura Blázquez, que ya ganó en el 2005 unas elecciones al propio Rouco. Carece de enemigos y es el favorito de gran parte del cuerpo episcopal. En la terna de candidatos figura también Osoro, precavido, buen comunicador y parecido a Francisco hasta en el físico. También goza de simpatías en el sector más abierto y representa una opción en línea con el Vaticano el afable Del Río.