La Guardia Civil informó ayer de la detención en Callosa de Ensarriá (Alicante) de cuatro jóvenes de entre 19 y 24 años como presuntos autores de un delito contra la intimidad, otro de agresión sexual y dos de abusos sexuales contra una mujer de 19 años. Los acusados, que habrían grabado los hechos con el móvil, ingresaron en prisión provisional sin fianza por orden del juzgado de guardia que instruye el caso que ha empezado a conocerse como el de La manada de Alicante, por su semejanza con el de Sanfermines.
La víctima, encontrada en un sótano semidesnuda junto a sus agresores, estaba en estado ebrio y posiblemente bajo los efectos de sustancias estupefacientes. Se quejaba de dolores en los genitales y no era capaz de recordar dónde se hallaba ni lo sucedido en las últimas horas.
La investigación reveló que dos de los agresores conocían a la víctima y se encontraron con ella en Benidorm la noche de fin de año. Con la excusa de seguir tomando copas, le sugirieron ir a casa de un conocido. Una vez allí, según señala la Guardia Civil, al parecer comenzaron con los abusos. Uno de los habitantes de la casa se dio cuenta y puso fin a la fiesta. Los cuatro hombres, decidieron ir entonces a Callosa, al local de uno de ellos, llevándose a la joven, que estaba en un estado en el que no podía andar sola.
