Estrada Fernández fue el encargado de pitar el partido ante el Real Madrid en la primera vuelta y anuló un gol claro a Postiga por fuera de juego que hubiera significado el 2-1 de un choque que acabó 4-0. Molinos se quejó tras el partido de ese tanto anulado y el colegiado catalán no había vuelto a pitar al Zaragoza desde entonces.