Los empleados de Caja3 han secundado hoy mayoritariamente la segunda jornada de huelga en coincidencia con el último día de plazo de la negociación del expediente de regulación de empleo en la que, según los sindicatos, no ha habido cambios significativos en los despidos, fijados inicialmente en 592.

Así lo ha señalado a los medios de comunicación José Miguel Franco, delegado sindical de UGT en Caja3, en la concentración de cientos de trabajadores de esta entidad ante la sede central de Ibercaja, en Zaragoza, en la que ha precisado que el cierre de sucursales ha sido masivo y el paro mayoritario con cifras similares a la jornada de huelga de ayer, en torno al 90 por ciento.

En la concentración, los trabajadores de Caja3 -integrada por Caja Inmaculada, Caja Badajoz y Caja Círculo- han coreado consignas como "No a los despidos en Caja3", "manos arriba, esto es un atraco", "Carrasco dimisión sin indemnización", en alusión al consejero delegado de la entidad, Luis Miguel Carrasco, o "Amado sal de la cueva", en referencia a Amado Franco, presidente de Ibercaja, entidad que prevé hacerse con Caja3.

Según Franco, a pesar de que ayer por la huelga las negociaciones estaban prácticamente rotas, hoy proseguirán en Madrid y los empleados confían en que finalmente se llegue a un acuerdo.

No obstante, ha asegurado que la propuesta de la empresa no ha variado sustancialmente al asegurar que aunque rebaja los despidos a 455, al mismo tiempo fija 60 suspensiones de contrato por un periodo de dos sin garantías de regreso en un límite geográfico, lo que las convierte en "despidos diferidos", y además no computa los empleados temporales que no renovarán su contrato.

"El número de despidos, que para nosotros es una de las claves de la negociación, apenas sufre variación. Simplemente hay una manera distinta de contabilizarlos", ha incidido Franco, quien ha hecho hincapié en que la parte social exige un descenso real de esas cifras y propone hasta 450 desvinculaciones porque en gran parte serían asumibles con prejubilaciones a partir de los 55 años y bajas incentivadas.

Por su parte, el secretario general de la federación del sector financiero de CCOO, Fermín Arellano, ha valorado el seguimiento de la huelga y ha asegurado que los representantes de los trabajadores que negocian con la dirección en Madrid permanecerán allí "hasta el último momento" para discutir todas las propuestas que se pongan encima de la mesa con la premisa de que los empleados no pueden pagar una crisis que no han provocado.

Ha insistido en la disposición de la parte social a que la negociación concluya con un buen acuerdo para todos los trabajadores, tanto para los que salgan de la entidad como para los que permanezcan en ella, con garantías de futuro.

En ese aspecto, aunque el periodo de consultas de ERE concluye hoy, los representantes de los trabajadores están dispuestos a permanecer en Madrid para seguir negociando el fin de semana.

"Tenemos que llegar a un acuerdo de una otra forma. Si no sería brutal" porque sería la primera vez, ha añadido Arellano, que se aplicaran despidos con una plantilla defiendo de forma unánime que se llegue a un pacto.

Arellano ha considerado que la huelga ha afectado tanto a la dirección de Caja3 como a Ibercaja porque "han flexibilizado posturas", aunque todavía no lo suficiente como para que se alcance un acuerdo, y ha apuntado que en el caso de que el lunes no hubiera pacto, iniciarán un nuevo proceso de movilizaciones.