--¿Cómo sobrevive una asociación de vecinos que no recibe subvenciones?

--Limitando los objetivos. Llevamos seis años trabajando y no hemos tenido problemas. Nosotros no preparamos grandes eventos, sino que participamos y apoyamos iniciativas solidarias para recaudar dinero y donarlo a entidades sociales y otro tipo de actividades. Nuestra filosofía es vigilar el barrio y velar para que todo esté correctamente. Para esto no necesitamos grandes cantidades de dinero.

--¿Nunca han pensado en formar parte de la Federación de Barrios de Zaragoza (FABZ)?

--No, porque preferimos mantenernos independientes y evitar acabar estando también politizados. La FABZ y la Unión Vecinal Cesaraugusta están muy politizadas. Al recibir subvenciones del Ayuntamiento de Zaragoza acaban siempre del lado del partido de turno. Preferimos ser independientes. Para nosotros es una ventaja porque podemos decir lo que queramos sin tener en cuenta el partido en el poder.

--Tiene su lado bueno, pero también tendrá uno malo.

--No tenemos voto. La asociación acude a las juntas de distrito y plenos, escucha, da su opinión, pero no puede votar. Este es el pero de la independencia. Aún así, nosotros nos dedicamos a cuidar el barrio, sin más, sin meternos en política.

--¿Qué es lo que la falta al distrito hoy en día?

--Dos cosas fundamentales: una piscina municipal y un centro de salud más grande. Aunque hayan sacado a concurso el Centro Deportivo Ebro el problema no se soluciona, solo parcialmente. Lo que se demanda en el barrio es una piscina municipal, no privada y la única oferta que aparentemente tendremos será esta, acudir a un centro privado. Por otro lado, el centro de salud que tenemos está obsoleto al 100% y no presta todos los servicios. Por ejemplo, necesitamos un servicio de rehabilitación. Ahora, tenemos que irnos hasta la calle San Pablo para poder ser atendidos. Teniendo en cuenta que cuando precisas de estos servicios es porque tiene un problema de movilidad, entre otros, no tiene mucho sentido. Es pequeño, no puede atender toda la demanda. Urge que se abra ya el nuevo. De todos modos, a ver qué hacen porque nos están diciendo que no hay dinero para amueblarlo y adecentarlo.

--También ha reclamado un centro de mayores

--Sí. Tenemos dos, pero son muy pequeños. Lo que pedimos es que se unifiquen en uno así todos ganaríamos. Se ahorraría en costes de mantenimiento, en alquileres y el nuevo sería más grande, mejor dotado, y no habría diferencias en equipamientos como ocurre algo. Sería la opción más lógica.

--La reordenación de las líneas de bus se ha convertido en el tema estrella. ¿Tienen algún problema en el barrio?

--La comunicación en general es buena. Sí es cierto que nos hemos quedado sin alguna línea, como la 20 o 27. No obstante, con las que tenemos, la 42 y 34, podemos llegar al centro y desde allí hacer trasbordo al tranvía u otro autobús. Es más incómodo, pero tenemos alternativas.

--Otra de las luchas del barrio es la mejora de las riberas.

--Nos prometieron mucho durante la Expo y no han hecho nada. Las riberas se han quedado obsoletas, están sucias y llenas de vegetación. Nos aseguraron que nos harían piscinas y se llegó a proponer una playa con arena artificial, pero todo quedó en el olvido cuando terminó la Expo. Sí que es cierto que el barrio lo arreglaron y adecentaron para 2008 y eso se nota, pero aun así las promesas se las llevó el viento.