Un grupo de zaragozanos se ha dirigido recientemente al Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) para quejarse de la actuación de la unidad de la UAPO en el Rastro de La Almozara. En declaraciones a este diario explicaron que los agentes requisan y destruyen todos los productos que ellos intentan vender en el mercadillo. "Los tiran a la basura y eso no lo pueden hacer", aseguraron. Son conscientes, por un lado, que no pueden instalarse allí, porque no tienen licencia, pero aseguran que su situación económica personal les ha llevado a intentarlo todo para obtener ingresos.

De hecho, según explicaron, han solicitado una reunión con responsables del Gobierno --también con Elena Giner, concejala delegada de la Policía Local-- para trasladarles una petición: "que oferten licencias a bajo coste para familias en riesgo de exclusión". Dice que quieren trabajar y que el precio actual por estar en el rastro es "inasumible" para ellos, pero no les importa que su ubicación sea la peor del mercadillo solo por que les dejen tener "una oportunidad". Y sobre todo que su material "no acabe en la basura" como sucede con la actuación de la UAPO.