El director y los otros seis miembros del equipo directivo del Conservatorio Superior de Música de Aragón (CSMA) han presentado su dimisión en bloque a la consejera de Educación, Mayte Pérez, apelando a la "falta de confianza" mostrada por la dirección general de Planificación y Formación Profesional, cargo desempeñado por Ricardo Almalé.

En una carta enviada el pasado lunes a la Administración y firmada por el director Agustín Charles, este expone que el equipo directivo considera que no puede trabajar "en unas condiciones adversas como las actuales, en las que abundan las contradicciones, cambios de opinión y ataques personales" de lo cual, según indica la misiva, "se poseen, además, documentos que lo acreditan".

La dimisión, adelantada ayer por la Cadena Ser, se justifica a raíz de la publicación en el BOA, el pasado día 2, de la orden por la que se convocaba selección de especialistas en el Conservatorio Superior de Música de Aragón. En ella, según Charles, "se hace caso omiso a las necesidades y petición de profesorado especialista del CSMA y de las modificaciones presentadas el día 30 de agosto del 2016, a petición de la inspección de la dirección provincial de Zaragoza", lo que, según el escrito, "consideramos la muestra más palpable de la falta de confianza en el equipo directivo actual por parte de la dirección general, lo que además deja en tela de juicio la autonomía del centro que precisa el CSMA y obliga la propia LOMCE".

POSIBLES CAUSAS

Según pudo saber este diario, y aunque el equipo directivo prefirió no hacer declaraciones, no solo la dotación de personal sino también las condiciones impuestas para su contratación estarían detrás de esta renuncia, que Charles confía en que se pueda llevar a cabo "a la mayor brevedad posible para beneficio de las relaciones de la mencionada dirección general con la nueva dirección del conservatorio".

Junto al director, también han presentado su dimisión los tres jefes de estudios, la secretaría académica y los dos coordinadores del centro.

La orden a la que hace referencia la carta, impone entre los requisitos de los candidatos que, al igual que en anteriores procesos, a los profesores especialistas no necesariamente titulados no se les exigirá el requisito de titulación y haber desempeñado de modo habitual y fuera del ámbito docente una actividad profesional remunerada relacionada con el campo educativo objeto de la contratación durante un periodo de al menos tres años dentro de los cinco anteriores a su contratación o designación. "Con carácter excepcional y de forma motivada, se podrá contratar o designar profesionales de reconocida competencia que no cuenten con dicho periodo", indica la orden.

La comisión encargada del procedimiento de selección y contratación de especialistas estará formada, según el texto, por el Director General de Planificación y Formación Profesional o persona en quien delegue, el director del centro y un miembro de la Dirección General de Planificación y Formación Profesional. La cuantía a percibir por el profesorado especialista será de 50 euros por hora lectiva y se necesitará la autorización de la DGA para poder establecer una contraprestación superior.

LO QUE DICE LA DGA

Desde el Departamento de Educación apuntaron que la dimisión del director "se debe a una decisión estrictamente personal" y añadieron que "la dotación de profesorado del centro no ha sufrido cambios en los últimos años. En todo caso, se observa un ligero aumento derivado de la disminución de una hora lectiva del profesorado, de 21 a 20 horas, en el mismo sentido que el profesorado de enseñanzas medias no universitarias, como ESO, Bachillerato o ciclos formativos".

Estas mismas fuentes subrayaron que las matriculaciones "tampoco han experimentado variación en los últimos cursos" y aclararon que "la normativa que regula el profesorado especialista establece que la convocatoria anual se deberá realizar con un mes de antelación al comienzo del curso. El adelanto de la convocatoria se fundamenta, por tanto, en posibilitar la selección y nombramiento de los profesores especialistas antes del comienzo de las clases, de forma que el alumnado no se viera perjudicado, privándole de actividades lectivas en las primeras semanas de curso".