Tres jóvenes se sentaron ayer en el banquillo del Juzgado de lo Penal número 5 de Zaragoza como presuntos autores de la brutal agresión que sufrió un vecino de la capital aragonesa, en septiembre del 2014. Una agresión en la que le robaron el móvil y que le dejó en coma unas horas, antes de quedar ingresado en la uci. Por ello, Miguel Antonio P. F., Carlos Antonio S. C. y Andrés Roberto B. G. afrontan cinco años de prisión cada uno por lesiones y robo con violencia, que la víctima, representada por la letrada Nadia Brahim, eleva a seis.
Los tres negaron ayer en el juicio que tuvieran nada que ver con la agresión, y solo reconocieron haber encontrado el teléfono, tirado en una carpa del Parque Delicias, por las fiestas. La víctima les reconoció en una rueda y ayer, pese a que, en un primer momento perdió la memoria por la agresión.
De hecho, las defensas de los presuntos atracadores (a cargo de Alfonso Bayo, Mónica Miguez y María Jesús Monreal, pusieron en duda esta recuperación de memoria, aunque un forense acreditó que es posible que, en forma de flashes o sueños, se vayan recuperando recuerdos perdidos por un trauma.
Junto a los tres se sentaron también en el banquillo Aramis E. R. y Stephanie G., acusados de receptación por comprar el móvil, por lo que para la Fiscalía debe imponérseles 15 meses de prisión. Ambos afirmaron que no sabían que era un teléfono robado.
